El titular de SACM, Ramón Aguirre, informó que el fenómeno pasó hace 12 años en el Sistema Cutzamala, pero reiteró que no presenta riesgos a la salud

A 10 delegaciones del Distrito Federal que les abastece de agua el Sistema Cutzamala aún les llega con "mal" olor y sabor a humedad, debido a la proliferación de microalgas en la presa Valle de Bravo.

Las demarcaciones afectadas con este tipo de agua son Cuauhtémoc, Benito Juárez, Álvaro Obregón, Azcapotzalco; parte de Coyoacán, Iztapalapa, Tlalpan, Magdalena Contreras, Cuajimalpa y Venustiano Carranza.

Ramón Aguirre, director general del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, informó que este fenómeno, el cual no es tóxico ni representa algún riesgo para la salud, se ha disminuido un 80 por ciento.

Sin embargo, señaló que hay todavía "muchas" cisternas y tinacos domiciliarios que tienen agua que se suministró durante la etapa donde no se sabía que estaba pasando.

"Es una problemática que se pudo controlar, pero de unos días para acá y aproximadamente una semana se estuvo recibiendo agua con esa problemática en la Ciudad de México, bueno, de hecho todo el Valle de México que depende del Sistema Cuztamala".

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) aplicó estudios de valoración de toxicidad, los cuales resultaron negativos en todas las muestras.

El SACM explicó que este problema se presentó hace aproximadamente 12 años y tiene que ver con los bajos niveles en las presas, mezclado con altas temperaturas.

"No es una situación que genere un problema de riesgo a la salud, esta sustancia (micro alga) no es tóxica y por lo mismo lo que genera es una problemática de olor, sabor diferente del agua pero que no representa ningún riesgo, se puede tomar, se puede uno bañar, puede uno cocinar con ella, etcétera, pero sí hay un problema de olor".

Indicó que lo que está haciendo la Conagua es tratar el agua carbón activado, mediante un proceso que no es el que se haría bajo una potabilización convencional de este tipo desustancias que ayuda a eliminar parte del problema.

El titular del SACM dijo que el método del carbón activado elimina la micro alga de manera parcial, pero en cuanto se presenten las primeras lluvias y bajen un poco las temperaturas el problema desaparecerá, "como pasó hace 12 años".