Nuevo Casas Grandes.- Usuarios del río Casas Grandes, comuneros, ejidatarios y vecinos de las comunidades de colonia Madero y Anchondo de este y el vecino municipio de Casas Grandes, se mostraron inconformes por el trabajo de rehabilitación del cauce del afluente que realiza personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) desde hace varias semanas.
De acuerdo a señalamientos de entre otros, Jesús Armando Villanueva Carrillo, miembro del Consejo de Vigilancia de la Asociación de Usuarios del Río Casas Grandes, las acciones que se realizan son perjudiciales, “porque se está devastando una buena parte de la flora del lugar, sino también se afecta a la fauna e incluso al mismo escurrimiento natural que provee al acuífero”.
Señaló que ante el trabajo que se realiza a través del Conagua, se convocó a los alcaldes electos de este y el vecino municipio de Casas Grandes, Rodolfo Soltero Aguirre y Humberto Baca Tena, respectivamente, para sostener una reunión en la cual se planteó la necesidad de efectuar un replanteamiento en las acciones de rehabilitación del cauce del Río Casas Grandes.
“Sabemos que se está invirtiendo un recurso que proviene de programas enfocados a atender las afectaciones por causa de inundaciones, sin embargo, consideramos que no se están haciendo las cosas como realmente se debieran hacer”, agregó enfático el vecino de colonia Madero.
Pidieron que se tome en cuenta la opinión de los productores y usuarios del río, porque “a final de cuentas son quienes saben por donde entra el agua a sus tierras”.
Cabe mencionar que en la reunión estuvo presente un ingeniero de apellido Juárez en representación de Conagua a quien se le reclamó que no respetara un acuerdo existente en el sentido de que por el lado poniente del río Casas Grandes no se iba a afectar la ribera.
“Que ya no nos quiten los árboles, mejor que se vayan a limpiar el sur de la república”, señalaron enojados algunos usuarios, en referencia a la situación caótica que se vive en varias entidades del sur del país a consecuencia de los estragos causados por los huracanes “Manuel” e “Ingrid”.
Asimismo cuestionaron las acciones que se realizan al considerarlas como injustificadas bajo la premisa de que se encuentra en ciernes la construcción de la Presa Palanganas, la cual presuntamente conllevará la regulación del flujo del caudal del río Casas Grandes.
“Por qué no esperar”, dijeron, al tiempo de agregar: “una cosa es que limpien el río de basura y ranas… pero que respeten los árboles”.
Y, es que, añejos y por ello gigantescos álamos y sauces, enclavados a la orilla del río Casas Grandes son derribados como parte de los trabajos de limpieza que se realizan, situación que se tradujo en que los inconformes montaran en cólera al ver lo que calificaron como “un ecocidio”.
“Están no solo acabando con estos árboles, sino también con jarillas, mezquites y taraices, amén de peces, ranas, patos, garzas. En fin, con todo”, agregaron sumamente molestos.
En la reunión, entre otros, estuvieron también presentes, el Presidente de Usuarios del Río Casas Grandes Francisco González y el Presidente del Comisariado Ejidal del Ejido Casas Grandes Ramón Villalpando, donde se mencionó que ya se había informado sobre la situación al delegado estatal de Conagua Alex Lebarón González.
“El río se defiende solo”, fue la conclusión que apuntaron los ejidatarios y comuneros del río Casas Grandes.