El presidente municipal de Tixtla, Guerrero, Gustavo Alcaraz Abarca, tras el paso del fenómeno meteorológico "Ingrid", destacó que aún se encuentra el proceso el periodo de desagüe de la ciudad, motivo por el que permanecen, hasta el momento, cerca de cinco mil personas en los albergues instalados por el gobierno estatal y local.
En entrevista para el espacio "A fondo", con Víctor Sánchez Baños, Alcaraz Abarca comentó que a causa de las inundaciones que provocó "Ingrid" en la localidad y debido a que la única forma de extraer el agua es por medio de sumideros naturales, fue necesaria la intervención de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la cual colocó un sistema de bombeo.
"Fue tanta el agua la que cayó que teníamos 13 millones de metros cúbicos del líquido; ahora, a través de un sistema de bombeo instalado por la Conagua, no se termina la extracción de la misma, esto a pesar de que ha bajado un promedio de 40 centímetros en el área urbana", detalló el alcalde.
Asimismo, indicó que a pesar de que ha sido un gran problema el sacar el agua, no hay reportes de enfermedades, motivo por el que se afirma que la situación se encuentra totalmente bajo control.
Por otro lado, informó que aún hay casas inundadas, pues el agua ha ido cediendo poco a poco. Ante esta situación, detalló que sí hay mucha pérdida en casa habitación y, a pesar de que no se han realizado cálculos económicos, se estima que son cerca de 100 casas con pérdida total, con daños parciales cerca de 800 y, en daño menor, 400.
"El problema es que casi todas las comunidades están en etapa de reconstrucción, Tixtla en proceso de sacar el agua. Por tal motivo, el último conteo arrojó que hay cinco mil personas, de las seis mil, en los diversos albergues instalados", finalizó el alcalde