Después de haber alcanzado su nivel más bajo el 9 de junio, con 42.63 por ciento, hoy las presas del Sistema Cutzamala están a 83.5 por ciento de su capacidad y las del valle de México, en casi 100 por ciento. No debemos confiarnos ni bajar la guardia, aún existe un panorama de sequía que está latente para 2014. Las lluvias derivadas de los últimos cinco fenómenos hidrometeorológicos de los meses de septiembre y octubre en nuestro país, aportaron a las presas del valle de México agua para una importante recuperación de su capacidad, informó el Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), dependiente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Fernando González Cáñez, director general del OCAVM, manifestó que en las presas del Sistema Cutzamala (SC) después de haber alcanzado su nivel más bajo el 9 de junio de este año, pues alcanzaron 42.63 por ciento, con la presencia de Lorena, Onda Tropical 8, Ingrid, Manuel y Raymond, se dio un giro y dichas presas comenzaron a recuperarse para alcanzar al día de hoy 83.5 por ciento de su capacidad y las del valle de México casi 100 por ciento.
Puntualizó: Villa Victoria está a 79.88 por ciento, con 148.366 Mm3 (millones de metros cúbicos); El Bosque, a 98.13 por ciento, con 198.605 Mm3; Valle de Bravo, a 77.74 por ciento, con 306.616 Mm3; Guadalupe, a 90 por ciento, con 51.279 Mm3; La Concepción, con 96 por ciento, con 10.568 Mm3; Laguna de Zumpango, a 79.8 por ciento, con 63.899 Mm3; Iturbide, a 93 por ciento, con 1.383 Mm3, y Madín, a 82.8 por ciento, con 16.032 Mm3.
González Cáñez aclaró que en el caso de los embalses del SC, aunque los niveles son prometedores, no son del todo satisfactorios frente a los compromisos de suministro del valle de México, pues estamos ligeramente por debajo de la media, sin embargo, lo que podría ayudar a impulsar el último tramo que nos falta es que, en lo que resta de la temporada de lluvias, lleguemos a 85 por ciento o más de su capacidad.
Alentó a los gobiernos del Estado de México y del Distrito Federal a continuar con la construcción de infraestructura hidráulica, que permita disminuir o mitigar los riesgos de inundaciones, así como obras que eliminen las fugas del vital líquido en las redes primarias y la aplicación de dispositivos para el aprovechamiento y manejo eficiente del agua.
Así mismo, exhortó a la población a no confiarse, ni bajar la guardia en el cuidado del vital líquido y su correcta administración, debido a que ésta es una oportunidad para implementar dispositivos ahorradores de agua en nuestras instituciones, empresas, escuelas, negocios o casas. No olvidemos que existe un panorama de sequía que está latente para 2014.