Pekín.- En tan solo 88 días, los residentes de Pekín finalmente podrán utilizar el agua del proyecto de trasvase de agua Sur-Norte, un proyecto con una serie de canales y tuberías para el que se han necesitado más de seis décadas en construir, y diseñado para abastecer al árido norte con agua del lluvioso sur.

La ruta central del proyecto, cuya construcción comenzó oficialmente a finales de 2003, abrirá las compuertas a finales de octubre.

En ese momento, el agua trasvasada del embalse de Danjiangkou en la provincia de Hubei llegará a la mayoría de los hogares de Pekín a través de 20 plantas de agua y después de 15 días de trayecto a lo largo de 1.276 kilómetros de canales y tuberías.

Si todo va bien, la infraestructura trasvasará 1.050 millones de metros cúbicos de agua a Pekín anualmente en los primeros años de su funcionamiento, una cantidad equivalente a casi el 30% del consumo anual de agua de la ciudad.

Se espera que esta agua ayude a aliviar la escasez de agua en la capital y a reparar los ecosistemas acuáticos locales.

Mientras tanto, la infraestructura que ha tardado tanto en construirse, parará próximamente su primera prueba.