El Cairo, Los cancilleres egipcio, Nabil Fahmy, y etíope, Theodoros Adhanom, examinaron en Argel el diferendo por la súper represa Renacimiento y las relaciones bilaterales, reveló hoy aquí el portavoz oficial del Ministerio de Exteriores.
La reunión tuvo lugar en paralelo con las sesiones de la XVII reunión Ministerial del Movimiento de los No Alineados que sesionó hasta la víspera en la capital argelina, precisó el embajador Badr Abdel Aty.
Lo nexos bilaterales están en punto de crisis debido a las aprensiones por la construcción en Etiopía de un gigantesco embalse que Egipto considera disminuirá el flujo por su territorio del río Nilo, vital para sus necesidades humanas y económicas.
El titular egipcio subrayó la postura de su país en "acoger con beneplácito negociaciones en cualquier momento si existe buena voluntad y seriedad de la parte etíope", acorde con el trascendido.
Addis Abeba asegura que los temores son infundados, pero un estudio de especialistas de ambos países y Sudán ha resultado insatisfactorio para El Cairo, que demanda mayores garantías.
La súper represa Renacimiento es el núcleo de un megaproyecto hidroenergético con el cual Etiopía planea producir suficiente electricidad para su consumo y exportar una porción a estados vecinos.
Egipto estima que el llenado del embalse y posterior operación disminuirán la cuota de 50 mil millones de metros cúbicos de agua anuales que tiene en este momento.
La parte etíope y otros países de la cuenca del Nilo aducen que el acuerdo data de la época de la dominación colonial y por lo tanto es nulo y vacío de contenido.
El diferendo es uno de los principales temas que tendrá que enfrentar el presidente electo egipcio, Abdel Fattah El Sisi, quien tomará posesión el próximo 7 de junio tras su aplastante victoria en los comicios de esta semana, a los que asistieron menos de la mitad de los votantes inscritos.