El gobierno de Nuevo León asegura que las obras del proyecto hidráulico Monterrey VI no afectarán ni la ecología ni la economía de la Huasteca potosina.

En un comunicado de prensa neoleonés, su gobernador, Rodrigo Medina de la Cruz anunció que el acueducto empezará a construirse a finales de este mes o a principios de enero y estará listo en tres años.

Sin hacer referencia a las críticas recientes lanzadas en contra del proyecto por ambientalistas y activistas neoleoneses por el impacto ecológico del acueducto y su alto costo, el mandatario neoleonés pareció responder a ambas.

Señaló que el proyecto del organismo Agua y Drenaje de Monterrey es una obra muy necesaria para la entidad, ya que le va a dar a Nuevo León la tranquilidad y la garantía de tener agua por décadas.

Sobre el impacto que tendrá en nuestro estado la obra, el gobernador señaló que el acueducto a construir extraerá del río Pánuco el 0.4% de su caudal, desde abajo del lecho del Tampaón, con lo que quedan salvaguardadas las áreas de interés agrícola, pecuaria y de agua para consumo humano de San Luis Potosí.

Por su parte, el director de Servicio de Agua y Drenaje de Monterrey, Emilio Rangel Woodyard, aclaró que el costo de Monterrey VI es de 14 mil millones de pesos y el incremento a 47 mil millones de pesos obedece a la operación del proyecto hidráulico durante los próximos 27 años, por lo que no habrá aumento en la tarifa.

El proyecto hidráulico, servirá para dotar de agua potable al área metropolitana de Monterrey durante los próximos 50 años, dará tranquilidad a la población de Nuevo León debido a que tendrán la seguridad de contar con agua potable, según explicó el mandatario estatal.

La construcción del acueducto Monterrey VI comprenderá 390 kilómetros, y se conectará con el ya instalado en la presa Cerro Prieto, para dar un total de 520 kilómetros de obra.