MÉRIDA, Yucatán.- Investigadores del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) participaron en el desarrollo de la primera reserva hidrogeológica en el país. Esto con el objetivo de garantizar hasta por más de 20 años el abasto de agua potable en la capital del estado y algunos municipios aledaños.
A diferencia de una presa, en una reserva hidrogeológica no se tiene contabilizado el nivel exacto de agua que almacena, dado que su flujo es constante y se encuentra por debajo de la tierra. Sin embargo, se estima que los mil 313.28 kilómetros de superficie que tiene esta reserva contienen, hasta el momento, poco más de 108 millones de metros cúbicos.
Esta reserva comprende una zona del anillo de cenotes de la entidad, localizado en los municipios de Cuzamá, Hocabá, Seyé, Acanceh, Xocchel, Huhí, Tahmek, Hoctún, Homún, Tekit, Kantunil y Sanahcat.
Laura Hernández Terrones, doctora e investigadora de la Unidad de Ciencias del Agua del CICY y responsable del proyecto, explicó que, para determinar dicha reserva, se desarrolló una estrategia consistente en la evaluación de una zona geográfica que reuniera las condiciones para ser propuesta como reserva, mediante un análisis geográfico (consumo, uso del suelo, actividades económicas).
Posteriormente, efectuaron un análisis documental, seguido de un estudio de campo que comprendió un monitoreo de la calidad del agua de los cenotes para conocer las condiciones del acuífero. “Todo esto dio como resultado la delimitación de la zona de reserva hidrogeológica, y el tiempo que podrá garantizarse el abasto de agua potable en la entidad”, afirmó.
Este trabajo fue posible gracias a los investigadores del CICY, particularmente a los doctores Mario Rebolledo Vieyra, Antonio Almazán Becerril y Francisco Valadez Cruz. De igual forma técnicos y estudiantes del mismo centro de investigación apoyaron el proyecto.
De acuerdo con la investigadora, uno de los mayores problemas en nuestro país en cuanto al abasto del líquido está asociado con la sobreexplotación de acuíferos. Por tal motivo, la especialista advirtió que abastecer de agua por medio de la reserva depende en gran medida de un trabajo conjunto entre científicos, gobierno y pobladores de los distintos municipios ubicados dentro de la zona de reserva.
Entre las acciones para resguardar el vital líquido, Hernández Terrones sugirió un pago por servicios ambientales hidrológicos, el cual podrá ser considerado por el gobierno del estado. Asimismo, la capacitación de los habitantes, mediante talleres para que aprendan a conservar el agua de los cenotes, resultaría ideal para garantizar el abasto.
El financiamiento de este proyecto fue otorgado por Conacyt, mediante el fondo mixto, en 2009. También se contó con la colaboración de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma) de Yucatán y con el gobierno del estado. El Gobernador de Yucatán, Rolando Zapata Bello, emitió el decreto de reserva el 19 de octubre de 2013.
