Como parte del Ciclo de Conferencias El Saber del Agua, el pasado miércoles 20 de abril del 2016 se celebró la segunda mesa de debate El agua y la vida con sede en el Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM.
La mesa estuvo conformada por un grupo de expertas dedicadas al tema del agua como medio físico y químico para el surgimiento y desarrollo de la vida en la Tierra.
En principio, la Dra. Gloria Vilaclara Fatjó, académica de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala UNAM, comentó que la estructura molecular del agua se considera un excelente medio para la generación de enlaces moleculares que propician la formación de cadenas de carbono, fundamentales para la vida. Asimismo, añadió que “la vida se encuentra aferrada al agua desde sus inicios” debido a que su origen está directamente vinculado a microambientes acuáticos en los cuales surgieron los primeros organismos simples, que a través de los años, han evolucionado de forma lenta y constante en organismos más complejos y diversificados a los diferentes ecosistemas naturales.
Por su parte, la Dra. Alicia Negrón Mendoza, investigadora de Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, resaltó que la búsqueda de evidencias que den respuestas a las distintas interrogantes de la ciencia continúa abierta. Particularmente, comentó que aunque no se ha resuelto el misterio del origen de la vida en la tierra o el cómo las propiedades específicas del agua ayudaron a su surgimiento, muchas disciplinas como la química, la física, la astrobiología, la geología y la biología, entre otras, han continuado sus investigaciones a través de la experimentación simulada en los laboratorios a nivel nacional e internacional.
Finalmente, la Dra. Valeria Souza Saldivar, investigadora del Instituto de Ecología UNAM, compartió el estudio de caso Cuatro Ciénegas como laboratorio y museo vivo de la evolución de la vida en México. Explicó que este reservorio representa, de manera casi perfecta, los primeros ecosistemas acuáticos en los cuales surgieron diversos microorganismos bióticos, que con el paso de los años fueron adaptándose a las condiciones ambientales de la región. Expuso que, actualmente este ecosistema se encuentra en grave riesgo de extinción debido al impacto social y ambiental, resultado del aumento de la actividad humana en la región y de la mala gestión del humedal por parte de las autoridades locales.