Guillermo Vales Castro, integrante del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Yucatán, reconoció la importancia del agua y advirtió del peligro en que se encuentra el recurso acuífero en la entidad por la contaminación, ya que los mantos freáticos no se cuidan y se contaminan con desechos, plaguicidas y pesticidas.

El Colegio de Ingenieros Agrónomos de Yucatán se reunió con Joaquín Díaz Mena y Jorge Zavala Castro, dos de los cuatro candidatos a la gubernatura, postulados por la coalición Juntos Haremos Historia y el Partido de la Revoluciòn Democrática, respectivamente. No asistieron Mauricio Vila Dosal (PAN y Movimiento Ciudadano) ni Mauricio Sahuí Rivero (PRI, Verde y Nueva Alianza). Ahí, Vales Castro manifestó que las cervecerías e industrias ponen sus negocios en Yucatán por el agua.

Cuestionó hacia dónde vamos con respecto a la situación del agua y su peligroso estado de contaminación. Indicó que en la entidad se aprovecha apenas el 10 por ciento del volumen total de agua de lluvia, mientras que el resto permanece en el acuífero o se va hacia el mar.

Esclavitud moderna

En su intervención, Huacho Díaz manifestó su desacuerdo con sus rivales ausentes: “Ni conocen la realidad del campo ni les interesa, quieren llegar al poder por la continuidad”, declaró.

Propuso dotar de fertilizantes orgánicos, a través de subsidios federales, tractores a comodato, y un desarrollo rural sustentable, con un instituto de agronegocios para investigar las necesidades del mercado y un plan integral de subsidios, en concordancia con el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador, candidato de Movimiento de Regeneración Nacional a la Presidencia.

Sobre la situación de la pesca en la entidad, indicó que el pepino de mar es uno de los principales ejemplos de los problemas generados por la corrupción. Afirmó que se dan permisos para capturar el equinodermo a los amigos del gobierno y son entre cinco y 10 permisos por persona para 20 o 30 lanchas.

Eso, dijo, trae gente de fuera con problemas como alcoholismo, además de que se convierte en una “esclavitud moderna” como con las tiendas de raya. Señaló que, de llegar a ser gobernador, habría más vigilancia en la costa, porque la mafia tiene “nombre y apellido”.

Por su parte, Jorge Zavala Castro propuso de los 200 millones de pesos que se gastan en desayunos escolares en el gobierno estatal sean redirigidos a adquirir los insumos de productores locales, para que ese dinero se use en las empresas y los campesinos yucatecos.

Manifestó que el cultivo de traspatio, proyecto que él comenzó en la UADY, fue prostituido por el gobierno de Rolando Zapata Bello. El objetivo, dijo, era generar suficiencia alimentaria y riqueza para los productores del campo, pero se usa como un programa asistencialista.