Ixtaczoquitlán, Veracruz.- El agua que consumen los habitantes de las regiones de Orizaba, Córdoba, así como de las zonas bajas está contaminada, y de ello son culpables los gobiernos municipales pues no existe una conciencia sobre un manejo correcto de los sistemas de drenaje, señaló el delegado de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) Luis Raúl Álvarez Oceguera.
El entrevistado dijo que tan solo en la zona baja, el agua que consumen es de mala calidad debido al mal tratamiento de la misma y las descargas residuales e industriales que hacen los ingenios cañeros.
"Estamos en la cabecera de tres importantes cuencas, dos de ellas en Veracruz que son el río Blanco y el Jamapa; de lo que pasa de las zonas rurales hacia allá no nos preocupa. El agua es de buena calidad".
Indicó que el abastecimiento de las cuencas que produce el Pico de Orizaba es suficiente para abastecer a 1.5 millones de habitantes que dependen directamente de él.
"Se está echando a perder y contaminando más de lo que echamos por el mal manejo de aguas residuales y tratamiento de aguas industriales y agroquímicos que se hacen por parte de la caña".
El funcionario expresó que el agua de las zonas industriales de la zona de Córdoba, viaja sin oxígeno, con muchos contaminantes industriales, agrícolas y suelos erosionados.
"La Conanp garantiza a la población que el agua que suministra el Parque Nacional Pico de Orizaba y la parte alta del cañón del río Blanco es buena, pero una vez que se vierte de la zona Córdoba-Orizaba para abajo, es indudablemente de mala calidad".
"Comunidades de menos de 50 mil habitantes no debieran tener un drenaje sino otro sistema de manejo de residuos sépticos, porque después las aguas van directamente a los ríos porque no hay recursos para poder operar las plantas de tratamiento".
Cabe decir que este sábado en Amatlán arribarán especialistas de la UNAM en el marco del Seminario Cogestión de Cuencas, Bosques y Agua, organizado por la Universidad Veracruzana (UV) y el Instituto de Estudios Sociológicos de la UNAM, donde se reunirán con los ambientalistas y defensores del río Atoyac donde habrán de exponer la situación que impera con los proyectos Bandera Blanca y Miguel Hidalgo.