China extenderá el programa piloto de impuestos al agua a más zonas para fomentar la conservación de este recurso, informó hoy martes el Ministerio de Hacienda.

Nueve regiones de nivel provincial, entre ellas Beijing, Mongolia Interior, Henan, Sichuan y Ningxia, comenzarán un nuevo programa piloto de impuesto al agua, tras 18 meses de pruebas en la provincia septentrional china de Hebei, según el comunicado oficial.

Después de que se acumule la suficiente experiencia gracias a estos programas piloto, la política se extenderá a todo el país.

El impuesto al agua, que se centra en prevenir el uso irracional de este recurso, se recauda en base al uso del agua de superficie y subterránea y tiene su raíz en el impuesto sobre recursos del país, que tiene más de 30 años.

El consumo de agua que sobrepase las cuotas o se realice en zonas sobreexplotadas verá multiplicado por cuatro la tasa, mientras que si es por motivos agrícolas se reducirá o se eximirá. El uso del agua que venga de las instalaciones de depuración de aguas también tendrá impuestos favorables.

Wang Jianfan, funcionario del Ministerio de Hacienda, describió el impuesto como un paso significativo en la estrategia de desarrollo ecológico de China, e indicó que ayudará a impulsar la producción amigable con el medio ambiente y el consumo.