El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha anunciado este miércoles que va a realizar una compra de combustible para suministrar agua potable a un millón de personas en las ciudades yemeníes de Hodeida y Taiz durante un mes.
La falta de combustible en Yemen se ha vuelto "crítica" debido al bloqueo de la coalición que lidera Arabia Saudí, levantado parcialmente esta semana, lo que ha dejado los sistema de agua de nueve ciudades sin combustible para hacer funcionar las bombas, ha explicado Iolanda Jaquemet, portavoz del CICR.
"Como último recurso y a la luz de las enormes y urgentes necesidades (...) vamos a comprar combustible para suministrar combustible a las corporaciones urbanas de agua en Hodeida y Taiz, lo suficiente para hacer funcionar sus bombas de agua durante un mes", ha indicado Jaquemet a Reuters.
El CICR va a comprar 750.000 litros de combustible para las dos ciudades, ha precisado, calificándolo de "medida de parche excepcional".
La falta de combustible ha tenido "un impacto cascada sobre varios sectores vitales", el agua y el saneamiento así como la salud y la alimentación, ya que los precios han subido acusadamente, ha destacado. El combustible es necesario para transportar mercancías y para hacer funcionar los generadores de los hospitales y mantener las cadenas de frío para vacunas y medicinas.
Arabia Saudí y sus aliados cerraron los accesos por aire, tierra y mar a Yemen el pasado 6 de noviembre, para frenar el flujo de armas hacia los rebeldes huthis desde Irán. La medida se adoptó después de que Arabia Saudí interceptó un misil disparado hacia Riad. Irán ha negado suministrar armas a los huthis.
Un primer barco con ayuda, con 5.500 toneladas de harina atracó en el puerto de Hodeida, controlado por los huthis, el domingo. "La ayuda humanitaria ha comenzado a llegar y es un primer paso muy bienvenido pero necesitamos importaciones comerciales", ha señalado Jaquemet.