En SP, el agua no respetó títulos ni lujosos acabados

Muebles y adornos finos, propios de una residencia de las partes más altas de San Pedro, quedaron destrozados entre agua y lodo, ya sin el cristal de los ventanales que daban al patio.

Vie, 02/07/2010 - 06:55

San Pedro Garza García.- Una bolsa de plástico con un empapado periódico del día permanece olvidada en la puerta principal de la residencia en la calle Versalles, en el municipio de San Pedro.

Nadie la levanta, nadie ha leído el diario ni le importan las noticias que publica en sus despintadas páginas. Nadie las leyó ni nadie las leerá.

No es para menos: los habitantes de esa casa en el Sector Francés de aquella exclusiva zona vieron no sólo caer la barda de su jardín trasero.

También vieron cómo el agua entraba con un cúmulo de lodo, piedras, ramas, todo lo que arrastraba a su paso con furiosa velocidad desde lo alto de la Sierra Madre Oriental.

Después, vieron cómo la misma fuerza de la corriente atravesó la barda al otro extremo del patio, con lo cual el agua pudo entrar y salir de su propiedad con total libertad para seguir con su ruta de estoica destrucción.

La propiedad se convirtió sencillamente en un tramo más en el feroz paso del agua que buscaba desesperada y enfurecida un río, un arroyo, un canal natural por el cual seguir su camino hasta el lejano Río Santa Catarina.

Los hidrólogos tienen razón: el agua siempre sigue su cauce y no hay título de propiedad que la convenza de lo contrario.

En aquella casa no sólo fue el patio lo que quedó destrozado, el agua entró en el domicilio y terminó con toda la primera planta, la que está a desnivel de la calle Versalles, convertida a su vez en un río violento e intransigente.

Muebles y adornos finos, propios de una residencia de las partes más altas de San Pedro, quedaron destrozados entre agua y lodo, ya sin el cristal de los ventanales que daban al patio.

Mientras tanto, la casa de junto padecía una situación muy similar, también inundada y destrozada en su primera planta por el paso del agua que no estaba dispuesta a detenerse.

En ambos casos, personal del municipio de San Pedro Garza García tuvo que sacar a las familias todavía sin poder resignarse a perder su patrimonio, como una irónica referencia a municipio como Juárez o Guadalupe.

Ninguna de las dos se preocupó por levantar el periódico frente a su puerta.
Antonio Argüello

Esta casa quedó en ruinas. Foto: Antonio Argüello

 

Fuente:

Antonio Argüello (02 de julio de 2010) En SP, el agua no respetó títulos ni lujosos acabados . Milenio
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