La titular de Medio Ambiente y Ecología en Lerdo, Amorita Salas, sostuvo que no hay nada que celebrar este Día Mundial del Agua, ya que sigue presentándose desabasto y sobre todo el desperdicio del agua en el país.

Lerdo, Durango.- La titular de Medio Ambiente y Ecología en Lerdo, Amorita Salas, sostuvo que no hay nada que celebrar y pero sí ocupar en materia de cuidado del agua, como es la preservación de las fuentes de abastecimiento natural que se tienen como son los acuíferos que se alimentan, como el caso de Lerdo, de la llegada del agua del río Nazas.

Hizo ver que la gente mal interpreta el hecho de que no se haga nada contra los explotadores de acuíferos, como son los productores de forraje al extraer un exceso de agua del subsuelo, por su parte la ciudadanía riega banquetas con agua limpia y hace mal uso del recurso de manera indiscriminada.

Salas Wesphal sostuvo que las únicas fuentes que se tienen son los acuíferos, por lo que en el caso de Lerdo si bien se tiene agua suficiente y de buena calidad, ésta no es exclusiva del municipio y en un momento dado se tendrá que compartir el abasto con Gómez Palacio e incluso con Torreón.

La bióloga subrayó la necesidad de ir induciendo desde el hogar a una mejor cultura del cuidado del agua, evitando el despilfarro desde la persona para su consumo humano, tareas domésticas y de aseo personal, ya que mientras que en países desarrollados y con alta cultura de su cuidado se gastan un promedio de cinco litros por persona, en México se gastan hasta 250 litros diarios por persona, lo cual se constituye un crimen.

La funcionaria explicó que la mejor manera de conmemorar el Día Mundial del Agua es orientando a los hijos al interior de las familias al buen aprovechando del recurso hidráulico, toda vez que en muchos de los hogares de la actual generación no conocen la escasez, toda vez que en sus casas cuentan con tinaco, lo que les permite tener disponibilidad del agua la mayor parte del año y las 24 horas del día, desconociendo la forma en que se vive en colonias de la periferia y en comunidades rurales donde hay días que se carece del vital líquido.