Naciones Unidas, Más de 14 millones 900 mil personas fueron afectadas en Filipinas por el paso del tifón Haiyan, muchas de ellas necesitadas de alimentos y refugio, según la actualización diaria de Naciones Unidas sobre el impacto del meteoro.
En su reporte sobre la situación causada por el azote de Haiyan hace 25 días, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) informó que alrededor de cuatro millones de seres humanos quedaron desplazados de sus casas, 204 mil de ellos ubicados en centros de evacuación.
La alimentación, el acceso a refugios, la recuperación de bienes y el restablecimiento de los servicios básicos permanecen como prioridades en las zonas golpeadas por el tifón, conocido localmente por Yolanda, precisó.
De acuerdo con la entidad, en áreas apartadas de las islas Visayas -zonas occidental y oriental- no llega suficiente comida debido a "retos logísticos".
También urge el apoyo a pequeños campesinos enrolados en el cultivo de la tierra, cuya temporada termina en enero y es clave para la subsistencia en el país del sudeste asiático golpeado el pasado 8 de noviembre por Haiyan y sus vientos superiores a los 300 kilómetros por hora.
Respecto al daño humano, el reporte de la OCHA refleja que las autoridades filipinas registran más de cinco mil 600 muertos, 26 mil 200 heridos y mil 760 desaparecidos.
En el caso de la infraestructura, hay afectaciones en carreteras, servicios básicos y un millón 200 mil viviendas, gran parte de las cuales quedaron totalmente destruidas.
Ante tal escenario de devastación, hay alertas de brotes de enfermedades, respaldadas por el descubrimiento de bacterias peligrosas en las aguas, lo que responde a la lenta remoción de escombros y la defecación al aire libre, señaló la OCHA.
La oficina de la ONU a cargo de cuestiones humanitarias indicó que hasta el momento han llegado 339 millones de dólares en contribuciones para la respuesta al desastre causado por Haiyan.
De esos recursos, 172 millones de dólares fueron destinados al plan de acciones lanzado por Naciones Unidas para respaldar al gobierno de Filipinas en el manejo de la tragedia, una iniciativa que requiere 348 millones, agregó.
