Como un “desarrollo histórico", calificó la mañana de este lunes el Ministro de Cooperación Regional, Silvan Shalom, de Israel, el traslado de aguas del Mar Rojo al Mar Muerto.
Shalom señaló que el programa del “Canal del Mar”, “ganó la bendición de nuestro primer ministro, bendición de Mahmud Abbas entre los palestinos y, por supuesto, la bendición del rey de Jordania”, según una entrevista a Radio Army, citada por el medio NRG.
"Israel, Jordania y la Autoridad Palestina firmaron un acuerdo para la transferencia de agua en de una tubería desde el Mar Rojo hasta el Mar Muerto”, agregó Shalom.
Israel establecerá un centro de desalinización en Aqaba y el concentrado de esta agua desalada se transferirá al Mar Muerto, dice el informe publicado el martes en el diario "Yediot Aharonot, agregó NRG.
El proyecto se había estancado hace un año, y Jordania había anunciado el "Canal de la paz", el cual era sólo el cinco por ciento de diseño original.
La idea no es nueva, y ya había concebido más de un siglo atrás, y cuenta con numerosos opositores que argumentan un daño irreversible a nivel ecológico. El propósito era aprovechar las diferencias de altura para generar electricidad. En 1998, el diseño del canal recibió apoyo de Shimon Peres y quien el consentimiento del Gobierno de Jordania, informa NRG.
Junto con la idea del canal, surgió la de salvar al Mar Muerto y la de una cooperación que podría fortalecer la paz con Jordania y los palestinos, agrega el medio israelí.
Para el proyecto, el Banco Mundial ya ha invertido alrededor de $ 16 millones, sólo en estudiar la viabilidad de la ingeniería. Según NRG, el proyecto económico y ambiental en sí cuesta muchos miles de millones, y pese que se había estancado por estas razones, esta semana renueva su impulso.