Una deficiente gestión del agua, la reducción de las precipitaciones y las presiones sobre el recurso han conducido a España a la actual situación de escasez hídrica, ha dicho hoy el economista y asesor de la Comisión Europea y Banco Mundial en políticas de agua Gonzalo Delacámara.
Gestión del agua
A juicio del experto, la “mejor manera de combatir las sequías es tomar medidas y actuar cuando no hay falta de agua”, quien ha recordado que este año hidrológico ha cerrado con un descenso del 14 % en las precipitaciones, “lo que significa que el nivel de agua disponible está descendiendo a un ritmo muy superior al que lo hace la lluvia”.
Delacámara ha recalcado que España padece una “enfermedad crónica”, provocada por la escasez del agua en general, que en periodos de sequías se agudiza por el descenso de las lluvias y el incremento de los usos de este recurso.
Foro de la economía del agua
Durante la jornada organizada en Madrid por la Universidad de Alcalá y la de Granada con el auspicio de McGraw-Hill, expertos nacionales e internacionales han dialogado sobre diferentes desafíos que enfrenta el agua, desde la gestión de los recursos y la seguridad hídrica en un contexto de cambio climático.
Así, el economista medioambiental y profesor de la Universidad Estatal de Arizona, Michael Hanemann, ha hecho una radiografía de la situación de California y ha incidido en la necesidad de “continuidad, perseverancia, coraje y voluntad política” para resolver los problemas hídricos.
Por su parte, el vicepresidente corporativo de Desarrollo Social y Ambiental del Banco de Desarrollo para América Latina CAF, José Carrera, ha asegurado que, en general, en la citada región “tenemos la percepción de que hay mucha agua” y “a veces, no somos conscientes de que es un recurso escaso y debemos hacer esfuerzos para conservarlo”.
A pesar de que, según estadísticas del Banco Mundial (BM), el 31 % de los recursos de agua dulce del mundo se encuentra en América Latina, Carrera ha explicado que en algunos países de la región “la demanda está lejos del agua” por lo que “hacen falta infraestructuras para llevarla de un sitio a otro”.
Además, ha destacado la importancia de la participación público-privada en la gestión, pero también la colaboración público-público, pues “los mejores casos han funcionado con la unión del nivel nacional y local”.
Las inversiones tecnológicas en agua han caído un 80% desde 2011 y las inversiones en infraestructuras y maquinaria, un 60%, agravando la situación en un contexto de cambio climático y escasez estructural
La representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en temas de agua, Lucie Pia Pluschke, ha subrayado la importancia de conocer cómo están cambiando los usos de este recurso y ha mostrado su “entusiasmo” por las sinergias entre agua, energía y comida.
Por último, el director del Foro, José Carlos Díez, ha recordado que “si no movilizamos todos los recursos económicos posibles, no podremos cumplir con el sexto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas”.
