Cada año, el mundo usa hasta cinco billones de bolsas de plástico y el peligro ambiental que esto representa centra hoy una campana de la ONU para acabar con la contaminación producida por ese material.

Por medio de su cuenta oficial en Twitter, el secretario general de la ONU comparte esta y otras informaciones sobre el tema, con el fin de llamar la atención y mover a más personas a la acción.

De los nueve mil millones de toneladas de plástico producido, solo el nueve por ciento es reciclado, escribió Guterres y abogó por el empleo de otras alternativas el almacenamiento y embalaje.

También la presidenta de la Asamblea General de la ONU en su 73 período de sesiones se sumó a la campaña desde las redes sociales para decir no a la contaminación por plástico que afecta a los océanos.

Según dijo en Twitter, se han encontrado microplásticos en el 90 por ciento de la sal de mesa proveniente de fuentes marinas.

A inicios de este mes, el secretario general de la ONU, António Guterres, alertó que el mundo enfrenta una emergencia por la situación de los océanos, pero su protección aparece en lo último de las prioridades de los gobernantes en lo que respecta a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

De acuerdo con el reciente reporte del titular de Naciones Unidas, el estado de los océanos nunca ha sido tan alarmante como ahora, mientras el ODS número 14, referido a la vida submarina, es uno de los más relegados.

Así arrojó una encuesta realizada a los líderes mundiales, anto lo cual Guterres pidió tomar bien en serio las amenazas al medio ambiente pues el futuro colectivo y la seguridad de la humanidad están en juego.

El informe del secretario general señala que, a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional por proteger y preservar el medio marino y sus recursos, la salud de los océanos se ve muy afectada por la contaminación, incluida la basura marina, en especial los plásticos.

También genera mucho daño el aumento de la pesca excesiva, las especies exóticas invasoras, el ruido subacuático, los efectos del cambio climático, la acidificación de los océanos y la degradación física.

En la actualidad, el contenido de calor oceánico mundial se encuentra en un nivel sin precedentes, mientras la extensión del hielo marino en el Ártico y el Antártico está muy por debajo de la media.

Ahora más que nunca, la comunidad internacional debe abordar los problemas oceánicos de manera integrada, interdisciplinaria e intersectorial, subrayó Guterres en su informe.

Sino se adoptan medidas concretas y urgentes, añadió, los Estados miembros de ONU enfrentarán dificultades para alcanzar las metas del ODS número 14.

Los océanos desempeñan una función esencial, ayudan a regular el clima global y constituyen la fuente principal del agua que sustenta toda la vida en el planeta, destacan los científicos.

Además, actúan como un importante sumidero de dióxido de carbono, lo que reduce considerablemente los niveles de gases de efecto invernadero en la atmósfera.

Por ello, el secretario general de la ONU lanzó una alerta mundial y pidió otorgar prioridad a la salud de los océanos.