El lluvioso mayo de París

La cancelación de 50 partidos a causa del agua reaviva la idea sobre la estadía del Roland Garros

DPA

PARÍS.- Los paraguas tomaron el lugar de las raquetas, y las tiendas de cafés se llenaron a cambio de canchas vacías.

La lluvia volvió a provocar ayer una estampa ya clásica en Roland Garros y alentó una discusión que divide al tenis: ¿debe el Abierto de Francia trasladarse a otra sede mejor?

El mítico Bois de Boulogne, la sede más pequeña de los cuatro torneos grandes de tenis, carece de canchas techadas y de instalaciones suficientes para la dimensión del torneo. La lluvia habitual del mayo parisino provoca cada año verdaderas guerras contra el cielo y la programación de los partidos, como volvió a ocurrir los últimos dos días, cuando muchos juegos programados tuvieron que cancelarse.

“Tendremos que cambiar todo e irnos. Es triste”, se resignó en una entrevista el presidente de la Federación Francesa de Tenis, Jean Gachassin. “Sentimentalmente hablando, estoy a favor de seguir donde estamos, pero tenemos que conseguir todo lo que necesitamos en términos de espacio”.

La decisión, sin embargo, no es tan simple. Mientras que muchos impulsan el traslado del torneo a un terreno más amplio fuera de París, otros defienden la actualización de la sede (utilizada desde 1928) mediante el agregado de una cubierta movible al menos en el estadio central.

La postura del presidente aún no se impone. Roland Garros, por ahora no se mueve, entre otros motivos, por los cerca de 600 millones de euros que se estiman necesarios para ello. La decisión no se tomará antes de febrero de 2011, y un hipotético traslado llevaría, además, otros cuatro o cinco años.

“Espero que el torneo se quede aquí”, dijo el suizo Roger Federer al ser consultado sobre el tema el miércoles. “Me encantaría volver dentro de 20 ó 40 años.

“Creo en las tradiciones, y obviamente sería muy decepcionante mudarse, pero al mismo tiempo, creo que es importante que todo el mundo tenga lo que busca. Si se plantea la cuestión, tiene que haber muy buenas razones”, añadió.

Los problemas con la lluvia se combinan con la falta de iluminación artificial, de modo que los retrasos provocados por las interrupciones se convierten en cancelaciones cuando comienza a oscurecer. Muchos encuentros pasan así al día siguiente, provocando a su vez más retrasos y cancelaciones.

¿Hasta qué punto la organización quiere evitar esa cadena?, esto quedó claro el miércoles con el alocado partido que disputaron el francés Gael Monfils y el italiano Fabio Fognini.

Después de cuatro parciales llenos de alternativas, se llegó al definitivo quinto set con una igualdad de 4-4. El juez decidió que se siguiera jugando, si bien en ese mismo momento (cerca de las 21:30 horas locales) el resto de partidos en marcha se suspendieron por falta de luz.

En medio de una penumbra total, Fognini se negó a jugar y recibió un punto de penalización. Luego ganó su servicio y llegó a un triple match point cuando sacaba Monfils. Pero el francés se recuperó ante el delirio del público local, ganó su game y dejó el partido en 5-5.

Y a 24 horas del saque inicial, Fognini derrotó a Monfils en un partido de más de cuatro horas.

Por segundo día en fila, los paraguas fueron el panorama más común en las tribunas de las diferentes canchas del complejo de Roland Garros.

Fuente:
DPA (28 de mayo de 2010) El lluvioso mayo de París. Excelsior.
http://www.exonline.com.mx/diario/noticia/adrenalina/tenis/
el_lluvioso_mayo_de_paris/963739

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