Los usuarios critican a Alarte por hacer «electoralismo» con el Júcar-Vinalopó

Los intentos del secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, de congraciarse con los regantes de la provincia de Alicante, ante los que se comprometió a mediar para lograr una eventual modificación en el trazado del trasvase Júcar-Vinalopó, han contribuido de forma indirecta a reabrir la guerra del agua en la Comunidad Valenciana.

La reacción al encuentro, desvelado por ABC, no se ha hecho esperar: los regantes del Júcar acusaron ayer al líder socialista de actuar con «irresponsabilidad», intentar «menoscabar sus derechos» y dar «falsas esperanzas» al sector agrario alicantino «de manera demagógica» con el único fin de «captar votos».

Como informó este diario el pasado domingo, Alarte mantuvo una reunión en Villena con representantes de la Junta de Usuarios del Vinalopó, consciente de que la política hídrica del Gobierno de Zapatero ha hecho que miles de votantes de la Comunidad Valenciana que viven de la actividad agraria den la espalda al PSOE.

De hecho, durante esa reunión se escucharon vivos reproches: el portavoz de la Junta de Usuarios, Ángel Urbina, advirtió a Alarte que el PSPV «nunca volverá a ganar unas elecciones en la zona del Vinalopó hasta que corrija el error garrafal y la traición a los regantes que supuso cambiar la toma del trasvase» desde Cortes de Pallás —donde estaba prevista en el proyecto inicial— hasta Azud de la Marquesa, en la desembocadura del Júcar.

El resultado de esta modificación, impulsada por el entonces secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, es que el agua trasvasada a la provincia de Alicante carece de la calidad suficiente como para regar con garantías la mayoría de los cultivos. Además, los agricultores han advertido de que su precio resulta prohibitivo.

En un intento de templar los ánimos, Alarte concluyó el encuentro de Villena con el compromiso de estudiar posibles soluciones, que pasarían por realizar una nueva toma en Azud de Antella, donde el agua tiene más calidad. Pero este compromiso ha puesto en pie de guerra a los regantes tradicionales del Júcar, quienes ayer calificaron abiertamente de «irresponsable» la actuación del secretario general del PSPV y expresaron su rotundo rechazo a la posibilidad de realizar una nueva toma del trasvase en el Azud de Antella. «Hablar del agua sin consultar a todas las partes implicadas es un ejercicio de irresponsabilidad», señalaron en un comunicado. «Alarte debería haberse informado antes de ir a Alicante a dar falsas esperanzas sobre la posibilidad de una segunda toma del trasvase».

«Demagogia»

El portavoz de los regantes tradicionales del Júcar, José Fortea, se reafirmó en que «no existen recursos para trasvasar ni en Cortes de Pallás, ni en Tous ni en Antella la ubicación alternativa propuesta desde Alicante, salvo que nos los quiten a los regantes del Júcar y a la propia ciudad de Valencia, algo que no podemos consentir». Tras recordar que «el agua es competencia del Estado» y la política hidráulica debe ser planificada con criterios de solidaridad, Fortea pidió a Alarte que no utilice esta cuestión «de forma demagógica para captar votos. Nunca nos hemos mostrado contrarios a la realización del Júcar-Vinalopó», señaló, «pero exigimos a los políticos que dejen de usar el agua como arma electoral».