La mancha de hematotalasia, ubicada en el oriente de la entidad, tiene una extensión de 60 kilómetros de largo y de dos a tres kilómetros de ancho

Las secretarías estatales de Salud y de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente de Yucatán dieron a conocer que existe una precontingencia y alerta sanitaria en el oriente de la entidad a causa de la marea roja, pese a que, aclararon, no es tóxica.

En rueda de prensa, la directora de Protección contra Riesgos Sanitarios de la Secretaría de Salud, Zazil Moguel Manzur, dijo que la mancha de hematotalasia tiene una extensión de 60 kilómetros de largo y de dos a tres kilómetros de ancho.

Sin embargo, sostuvo, no representa ningún peligro para el turismo que acude a las playas o consumen productos de mar.

La funcionaria señaló que ese fenómeno está avanzando a la zona poniente del estado, pero aún se encuentra a más de tres millas náuticas de la playa más cercana, razón por la que su llegada podría suceder cuando concluya la temporada vacacional de verano.

Ese fenómeno se ubica entre las costas de las comunidades de Río Lagartos y San Felipe, al oriente del estado, y es la segunda marea roja que se presenta en el año; la primera, reportada el 22 de julio pasado, fue disipada por una tormenta tropical.

El segundo aviso fue el 5 de agosto pasado, con mayores concentraciones con peces muertos, con ocho millones del dinoflagelado Scrippsiellla trochoidea, dos millones de las diatomeas Pleurosigma y medio millón de Cylindrotheca closterium por cada litro de agua.

Tras señalar que el promedio de concentración debería ser de 50 a 10 mil por cada litro de agua, el titular de la Seduma, Eduardo Batllori Sampedro, dijo que las mareas rojas "son normales" esta época del año y, en este caso, la muerte de los animales es por la asfixia.

Aclaró que no se trata de un fenómeno pegado a la costa y que el turismo pues estar tranquilo, y añadió que no se prevé una elevada mortandad de peces, pues en esta ocasión la mancha es superficial y se espera su pronta dispersión.

"Son procesos que ocurren de mayo a septiembre y se deben a los vientos alisios del Canal de Yucatán que generan florecimiento masivo de microalgas no toxicas, pero si nocivas para algunos organismos acuáticos, pues obstruyen sus branquias y les provocan asfixia", anotó.

Reportó que en que la calidad del agua de playas como Progreso, a donde llegan visitantes de crucero, es de "buena calidad", pero al mismo tiempo llamó al sector pesquero a evitar una posible mezcla del producto capturado, es decir, de peces que pudieran morir por asfixia.

Llamó a los restauranteros y al área de comercialización de alimentos a "tener mucho cuidado con lo que vendan, que esté en óptimas condiciones, con el objeto de que los comensales tengan certeza de inocuidad en los alimentos para evitar complicaciones",

Puntualizó que se reforzó el monitoreo de la mancha con tomas de muestras los miércoles y viernes, sobrevuelos los martes y jueves, así como la vigilancia de la costa y de la calidad del agua los lunes.