Saltillo, Coahuila.- Contratar los servicios de los que se anuncian en la Sección Amarilla es difícil, debido a que la mayoría no contesta las llamadas o asegura que no puede brindar el servicio por la alta demanda.

Jaime Corpus es uno de ellos. Lleva 20 años ejerciendo este oficio, el cual tuvo que aprender al trabajar en la construcción, y a que en ocasiones no podía contar con un plomero.

“En ese ramo uno tiene que meter la mano, ahí le agarré la onda a la plomería”, comentó.

Este plomero se encontraba realizando un trabajo en la colonia América después de haber atendido a dos personas y teniendo tres en la lista de espera, más los que le llamaran después.

El jueves estuvo en cinco domicilios arreglando las tuberías, pero pudo haber hecho más. “Ese día empecé hasta las 11 de la mañana porque a la camioneta que traemos se le congeló el agua y no podíamos echarla a andar”, argumentó.

Lo que pasa con las tuberías, señala el plomero, es que el agua, al congelarse, se va comprimiendo, por lo que no aguantan y se revientan. “La gente debe empezar a sacar agua para que corra el hielo y se salga, ir consumiendo en la casa para que no se vuelva a congelar”, explica.

Jaime Corpus afirmó que de acuerdo a la demanda aumentó un poco el precio de los servicios, pero “no mucho, porque se les da preferencia a los clientes. Se cobra desde 150 hasta 450 pesos, según el servicio”.

El plomero recomendó a la ciudadanía cubrir la tubería para que le dé calor y no se comprima el agua, sobre todo con protectores aislantes y periódicos.

Otra de las cosas que se pueden hacer para prevenir los daños es dejar una llave goteando levemente. “Es muy bueno para que vaya corriendo el agua y no se estanque,” señaló.

Para prevenir el estallamiento de las tuberías, el plomero Jaime Corpus recomienda:

Cubrirlas con protectores aislantes y periódicos.
Dejar una llave goteando levemente para que no se estanque el agua.
(Con información de Vanguardia.com.mx)