El municipio de Tultitlán castigará con más de11 mil pesos a quienes desperdicien agua potable en acciones como el lavado de carros o las banquetas, utilizando mangueras, y hasta con 56 mil pesos a quienes deterioren cualquier instalación del organismo de agua. En caso de reincidencia, la multa se duplicará y se aplicará la restricción del servicio.

De acuerdo con el Reglamento de Infracciones y Sanciones para el Desperdicio de Agua de este Ayuntamiento, que entrará en vigor en el mes de marzo, todos los ciudadanos deberán reportar fugas de agua y se obliga a utilizar agua tratada o pluvial en empresas, negocios de lavado, gasolinerías y en la construcción y rehabilitación de inmuebles.

Tultitlán es uno de los primeros municipios en establecer este tipo de reglamentos, donde también señala que las autoridades promoverán áreas protegidas para garantizar las fuentes de abastecimiento de agua potable en el municipio, establecerán programas de prevención y control de la contaminación del vital líquido, supervisarán zonas industriales, comerciales, agropecuarias, urbanas y habitacionales.

El Reglamento es obligatorio en las zonas urbanas del municipio, mientras la prestación del servicio de agua potable, saneamiento y alcantarillado en áreas rurales contará con comités de agua, drenaje y saneamiento y se regirán por su propio reglamento, en coordinación con la dependencia municipal.

Algunas medidas que se señalan son: que para riego se utilizará de preferencia aguas residuales, la obligación de reportar fugas, mantener en buen estado la infraestructura intradomiciliaria, emplear aditamentos economizadores de agua en donde sea factible para evitar pérdidas, fugas y desperdicios de agua.

Además, se prohíbe el desperdicio, el lavado de vehículos y riego de banquetas con manguera y sin instrumentos frugales, o cualquier sistema que ostensiblemente desperdicie agua; incluso, las industrias que emplean agua potable en el proceso de elaboración de sus productos deberán contar con los tratamientos del agua residual cuando así lo determine el organismo de agua, a fin de que sea reutilizada.

La normatividad establece que se evitará el riego con agua potable de parcelas rurales y semiurbanas de cultivos, pero también se evitará utilizarla en empresas de lavado, gasolineras para lavado, en la construcción, ampliación y rehabilitación de inmuebles y optar por agua tratada o pluvial.

El organismo de agua podrá sancionar por desperdiciar ostensiblemente el agua, por no permitir el libre acceso o condicionar la utilización de hidrantes colectivos, o conectarse a esos clandestinamente; por utilizar aguas claras de primer uso en actividades que no lo requieran, cuando se disponga de aguas residuales tratadas o pluviales. Las sanciones también se podrán aplicar por no mantener en buen estado la infraestructura intradomiciliaria, a quien instale de forma clandestina conexiones .

Además, se señalan sanciones a los usuarios que sin autorización ejecuten por sí, o por interpósita persona derivaciones de agua y alcantarillado, a quienes deterioren cualquier instalación del organismo, a quien proporcione información falsa al contratarse como usuario, modifique el diámetro de la toma o descarga.

Al aplicar las sanciones se tomará en cuenta la gravedad y frecuencia de la falta, la condición socio económica de la persona, la importancia del daño causado y la reincidencia.