Parral, Chih.- Tras una cortina que hace la función de puerta, entre sartenes sucios y unos baldes vacíos, la cara del pequeño José no se ha aseado en días, con la boca seca solo pide "agua, agua y más agua", afuera la temperatura alcanza los 40°C.
En la colonia Santa Elena los lamentos se agolpan igual que la basura en la calle principal, desde que se fundó hace más de cinco años no hay energía eléctrica ni agua potable, las pipas pasan una vez cada semana o cada quince días, para abastecerse del vital liquido tienen que caminar unos 5 kilómetros con botes y garrafones, pese a que habitan cerca del río, esto no sirve de nada, en algunos ríos sacar peses en un crimen, aquí es un milagro, esta seco.