La nueva ley del Agua del Estado de México, aprobada hace unos días por la Cámara de Diputados, ahora está en manos del Ejecutivo estatal
NAUCALPAN, Méx.— De cada 100 metros cúbicos del agua potable que se distribuye en el Estado de México, casi 70% no es pagada por los consumidores, por lo que los organismos del agua de la entidad enfrentan una situación de quebranto, problema que la nueva ley en la materia busca resolver, afirmó Martín Sobreyra Peña, presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos de la Legislatura mexiquense.
La nueva ley del Agua del Estado de México, aprobada hace unos días por la Cámara de Diputados, ahora está en manos del Ejecutivo estatal, quien decidirá en breve su publicación en la Gaceta de Gobierno, indicó el diputado local.
Esta ley busca sacar del quebranto económico a cerca de 40 organismos municipales del agua que actualmente operan con números rojos y que en muchos casos no tienen dinero “ni para el pago de nómina de sus empleados”, indicó Sobreyra Piña.
De cada 100 metros cúbicos de agua potable disponible en el Estado de México, 30% se pierde en fugas y de los 70 metros cúbicos restantes, los gobiernos locales sólo recaudan el cobro de 50%, por lo que los consumidores sólo pagan por el equivalente a 35 metros cúbicos del vital líquido.
Hay municipios, apuntó el diputado mexiquense, como Nicolás Romero en donde 70% de los consumidores no pagan el agua potable que consumen, lo cual ha llevado a una crisis económica a los organismos de agua potable, alcantarillado y saneamiento.
La nueva Ley del Agua no busca privatizar este servicio, por el contrario, tiene como objetivo mejorar la prestación y optimizar la distribución y saneamiento del afluente, reiteró Martín Sobreyra.
En el Estado de México hay cerca de un millón de personas que no tienen agua potable entubada directamente en sus domicilios, población sedienta que en su mayoría se concentra en municipios metropolitanos del oriente mexiquense como Ecatepec, Chimalhuacán, Valle de Chalco, Chicoloapan e Ixtapaluca.