Existe un decreto de veda publicado en el diario oficial de la federación de las aguas superficiales de la parte Río Soto la Marina que establece que no existe disponibilidad de este suministro

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- La construcción del segundo acueducto que pretende llevar a cabo el Gobierno del Estado para abastecer de agua a la mayor parte de los victorenses luego que el actual denominado “Guadalupe Victoria” ha cumplido su ciclo, dependerá mucho de las negociaciones que realice la autoridad estatal con los usuarios actuales de la Cuenca Río Soto la Marina para conseguir su derecho de explotación.

Roberto Schuldes Dávila, Gerente Regional del Organismo de Cuenca Golfo Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), recodó que existe un decreto de veda publicado en el diario oficial de la federación de las aguas superficiales de la parte Río Soto la Marina que establece que no existe disponibilidad de este suministro.


Eso no significa que este vaso lacustre no tenga agua, simplemente se debe respetar dicha prohibición lo que tampoco quiere decir que no se vaya hacer el acueducto, la diferencia es que las autoridades estatales tendrán que conseguir los derechos de alguien, pues esta agua ya está repartida entre los usuarios de la cuenca antes citada.

Pues asegura que este suministro no se puede tomar directo por la razón antes descrita, además la Conagua apoya a la Comisión Estatal del Agua de Tamaulipas (Ceat) en el estudio técnico que se está haciendo para elaborar el proyecto ejecutivo, así también el de factibilidad y de las posibilidades de donde y a quien se les pueda adquirir los derechos o canjear y cómo lo puede modificar.

Estas acciones señala, están llevándose a cabo por una empresa contratada por el Gobierno del Estado en la que se están invirtiendo cerca de ocho millones de pesos, “nosotros los estamos apoyando con recursos federales para la realización de este tipo de estudios”.

Asegura que las pérdidas de agua que se tienen por conducción son sumamente altas y unas de las prioridades del proyecto es hacer un planteamiento para evitar las fugas, porque no solamente es de aumentarle más suministro, “primero no hay que tirar la que traemos si se requiere más”.

Y señala que también se está haciendo el estudio que es parte del mismo de la disponibilidad y necesidades a futuro para el año 2030 de cuanto crecerá la población, es decir que se hace una proyección de la demanda de cuanto suministro se va necesitar para la zona urbana para uso público para ese año.

Y en base de ese uso, es la cantidad, el diámetro, el tamaño y la urgencia, dejando en claro que en este momento no es determinante la construcción del segundo acueducto.