La antigüedad de las tuberías de distribución de agua potable en Mérida ocasiona de 30 a 35 fugas durante el día, informó ayer el director de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán, Roberto Pinzón Álvarez.

Para la Japay, esos reportes de fugas son una cifra muy baja si se toma en cuenta que la red de distribución del agua potable es de 4,000 kilómetros y una gran extensión de tuberías fueron instaladas en 1966.

"El problema de las fugas de agua potable es en las colonias antiguas, donde las tuberías son viejas y no están lo suficientemente enterradas", explicó Pinzón Álvarez, entrevistado ayer en la mañana en relación con la fuga de agua de la calle 71-A con 14 de la colonia Azcorra.

Dijo que apenas se enteraron del hecho por medio de yucatán.com.mx una cuadrilla reparó la tubería fisurada.

Se vio otra fuga de agua potable sobre la calle 95 entre 44 y 44-A de la colonia Santa Rosa, la cual lleva varios días por el encharcamiento.

Pinzón Álvarez informó que muchas veces la ciudadanía no reporta estos hechos porque no les afecta. Por ello solicitó por escrito la colaboración de la Secretaría de Seguridad Pública y Dirección de Policía Municipal de Mérida para que cuando los patrulleros que circulen por las calles de la ciudad vean alguna fuga la reporten a la Japay para su reparación.

"Debemos evitar el derrame de agua potable", señaló. "Mientras más rápido reporten algún desperfecto menos agua se desperdicia".

Recordó que la Japay realiza trabajos de sectorización y planea la rehabilitación de 52 zonas de Mérida. Hasta el momento llevan 29 renovados con tubería nueva y de mayor diámetro, instalación de válvulas de control, cambio de tomas domiciliarias y de medidores.

En ocasiones son casi indetectables porque cuando hay fisuras de la tubería y el agua halla un canal de desagüe en alguna cueva o cenote no sale a la superficie el brote del líquido sino que se va para abajo.

Estas fallas ocultas las detectan cuando hay una baja presión en el suministro de agua en forma anormal. Entonces la cuadrilla de mantenimiento realiza una revisión con un equipo detector de fugas durante las noches para no entorpecer el tráfico, evitar algún accidente y escuchar con mayor claridad el ruido que produce la caída de agua en alguna oquedad.

"Tenemos unas 24 colonias y fraccionamientos de Mérida con una red muy antigua", señaló el funcionario.

"No hay reportes que salgan de la normalidad. Recibimos de 30 a 35 diarios y las cuadrillas reparan de 8 a 12 durante su jornada laboral", explicó.

Dijo que la Japay cuenta con cinco centros de mantenimiento que están ubicados en lugares estratégicos de la ciudad con el objetivo que las reparaciones se realicen lo más rápido posible. En promedio una reparación de tubería tiene una duración de una hora y media y gastan unos $240 en materiales.

"Cuando concluyan los trabajos de cierre de circuitos y de sectorización tendremos una presión de distribuición de agua estandarizada y será más fácil detectar estos desperfectos", señaló. -Joaquín Chan Caamal.