Los pobladores de una localidad del centro de Honduras se encuentran en la actualidad seriamente afectados por la contaminación irreversible de las fuentes de agua, lo que ha causado en los habitantes de esta comunidad problemas en la piel y los ojos y hasta la muerte de un recien nacido, denunció este miércoles un organismo ambientalista.
"Ochenta de cada cien habitantes padecen de problemas en la piel y los ojos por la contaminación de las fuentes de agua" en la localidad de Valle de Siria, afirmó en rueda de prensa Juan Almendáres, coordinador del Movimiento Madre Tierra Honduras, que atribuyó la situación a la actividad minera que se desarrolló en el lugar hasta 2008.
Almendáres detalló que, sumado a estas afecciones, los habitantes de la zona "padecen problemas en el sistema nervioso, caída del cabello, abortos, infertilidad, partos prematuros, muerte de recién nacidos e intoxicaciones".
Por su parte, el vicepresiente del Comité ambientalista de la localidad de Valle de Siria, Roger Escobar, señaló que en el lugar operó entre 2000 y 2008 la minera candiense Goldcorp, responsable de contaminar ''las fuentes de agua" de forma "irreversible",
Escobar comentó que en la comunidad, donde viven alrededor de 40 mil habitantes, ''han tenido que recurrir a cualquier tipo de agua y eso ha afectado su salud".
Asimismo, el coordinador del Movimiento Madre Tierra, consideró que en esta situación, las mujeres han sido ''las más afectadas'' por la situación debido a que "tienen mayor contacto con el agua contaminada".
"Lo que nosotros queremos es que las empresas mineras se vayan del país", subrayó Almendáres quien destacó también que la industria minera aporta menos del 2 por ciento del producto interno bruto (PIB) nacional.