Vecinos de la estación de La Floresta han denunciado el caso en reiteradas oportunidades a las autoridades regionales y no han obtenido respuestas.

Barinas - Hace un año Pdvsa decidió cerrar la estación de servicio La Floresta, porque uno de sus tanques subterráneos empezó a filtrar gasolina, y el combustible contaminó la vena principal de agua que alimenta a la perforación de donde se abastecen 375 familias.

Hasta el momento, los vecinos afectados buscan la forma de que el agua no les cause daño. La hierven, usan dispositivos purificadores, pero el agua sigue saliendo por las tuberías con olor a gasolina.

Juan Remolina, habitante de La Floresta dijo que "la situación nos ha afectado de diferentes manera, porque el proyecto de consolidación de la comunidad ha tenido que paralizar la colocación de tomas de agua para 120 familias, que estamos en el sector dos".

Indicó que las familias habitan en ranchos y a otras pocas ya les construyeron casas, pero lo que pareciera no tener marcha atrás son las erupciones en la piel en las personas, los daños estomacales y el desagradable olor a gasolina.

El vecino considera que el gobierno ha sido consecuente con La Floresta, sin embargo, en este caso nada se ha hecho para solucionarlo. El Instituto Regional de Viviendas y Consolidación de Barrios (Iaveb), no ha atendido el llamado que se les ha hecho, y por si fuera poco, ni siquiera son escuchados.

Refirió que el caso ha pasado por la responsabilidad de diferentes funcionarios del Iaveb, y un año después de que fuera clausurada la gasolinera, el problema con el agua sigue igual. Temen que en cinco años, las consecuencias sean peores de las que sufren actualmente.