Pequeños productores agrícolas tanto de Cúcuta como del municipio de El Zulia están tomando agua de manera fraudulenta de los sistemas de captación de las bocatomas del acueducto que opera Aguas Kpital Cúcuta para actividades de riego de cultivos y cría de peces en estanque.
La denuncia la hizo el gerente general de la compañía Hugo Vergel, al señalar que operarios del acueducto destacados en las plantas de El Pórtico, que capta líquido del río Pamplonita, y Carmen de Tonchalá, que toma el agua del río Zulia, descubrieron tomas ilegales de agua de los sistemas de captación que conduce el líquido a las plantas de tratamiento.
“Lo que más duele, sobre todo en esta temporada de escasez por el fenómeno de El Niño, es que esa agua para el consumo de los cucuteños que nos están quitando de manera ilegal la están utilizando para labores de riego de cultivos y para la cría de peses”, lamentó Vergel.
El directivo señaló que no cabe en la cabeza de nadie sensato, más cuando los ríos comienzan a secarse y cuando las lluvias están ausentes, que haya gente dándose el lujo de regar matas con el agua del consumo de toda una ciudad.
Vergel señaló que en total, por ambos sistemas, se están perdiendo 300 litros por segundo de agua.
Pidió la colaboración de la ciudadanía para que denuncie a quienes están detrás de estas actividades que atentan contra los derechos de los ciudadanos de contar con agua permanente y de manera continua en sus hogares para su consumo.
EL NIÑO PREOCUPA
El gerente de la compañía de acueducto señaló que frente al fenómeno de El Niño la preocupación es igual a la que existe en las demás ciudades del país, aunque, dijo, hay que decir que en Cúcuta hemos sido afortunados porque los niveles de los ríos (Pamplonita y Zulia) no llegan a niveles críticos que impliquen disminución de la producción ni del consumo.
El Pamplonita, que es de donde se capta la mayor cantidad para el consumo de Cúcuta, se ha mantenido la captación en bocatoma entre 6 y 7 metros cúbicos.
Sin embargo, Vergel dijo que no se ha descuidado un momento el monitoreo en las cuencas tanto de este afluente como del Zulia, para que en caso de llegarse a niveles críticos (es decir, captaciones de 2 y 3 metros cúbicos) se pueda reaccionar a tiempo para que los usuarios no se vean perjudicados.
Esta reacción, empero, ya está en marcha desde hace varios meses con el plan de contingencia, dijo Vergel.