La Policía Federal brasileña acusó a la petrolera estatal Petrobras por el supuesto vertido de agua contaminada en el océano Atlántico, informó este lunes la prensa local.
Según explicó el jefe policial Fabio Scliar, Petrobras habría abocado 546 millones de litros de agua contaminada al mar el año pasado, no solo en Brasil sino también en aguas internacionales.
Petrobras trata la mayoría de los residuos tóxicos producidos por la exploración de petróleo en sus propias plataformas, pero el uno por ciento de los residuos se envía a otras terminales para su tratamiento. La policía alega que en lugar de recibir dicho tratamiento, el agua contaminada está siendo vertida directamente al mar.
La investigación se inició a finales de 2011 cuando la compañía fue acusada de eliminar inadecuadamente los residuos producidos por la refinería de Duque de Caxias (en Río de Janeiro). Entonces, Petrobras fue multada con 3,3 millones de reales (1,63 millones de dólares estadounidenses).
La compañía estatal emitió un comunicado diciendo que "respeta todas las exigencias nacionales e internacionales y los reglamentos ambientales". Asimismo, Petrobras dijo que el agua obtenida durante la exploración de petróleo es tratada y desechada de acuerdo con las leyes brasileñas que son "tan rigurosas como las de Estados Unidos y Europa".
"En las plataformas en las que no hay un sistema de tratamiento, el agua es enviada a otras plataformas o instalaciones para la disposición apropiada", aseguró Petrobras.