Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En esta temporada de estiaje, las fuentes de abastecimiento de agua de Morelia bajan sus niveles y a pesar de que el Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Morelia (OOAPAS) cuida su adecuada operación para mantener el servicio del recurso natural en la ciudad, es importante que todos los usuarios participen en el cuidado de este líquido vital, para que no exista escasez.

El primer paso para tomar conciencia de cuánta agua se utiliza y descubrir si hay excesos en el uso, es tener un medidor instalado en el domicilio y así conocer el consumo promedio a través de su lectura constante.

¿Cómo hacer esto? El medidor cuenta con un reloj, donde los números de color negro identifican la cantidad de metros cúbicos de agua que se han utilizado en el inmueble.

Así, se puede iniciar el registro en una bitácora y tomar la lectura del medidor cada tercer día o semana, anotando los números negros que se leen de izquierda a derecha. Cada dígito representa un metro cúbico consumido, lo que corresponde a mil litros de agua.

Al conocer la cantidad de líquido que se utiliza, es posible tomar medidas de ahorro que no sólo representarán un beneficio económico, al bajar el costo del servicio, sino que también toda la población estará participando activamente en el cuidado del medio ambiente.

El medidor también es una herramienta útil para los usuarios, pues ayuda a detectar fugas, el procedimiento a seguir sería que al final del día, antes dormir, se anote la cifra que indique el medidor y por la mañana volver a tomar la lectura. Si la cantidad no ha variado, está libre de fugas, pero si el reloj se movió durante la noche es un indicador de que el agua se está perdiendo por alguna arteria y es conveniente revisar con un plomero las instalaciones hidráulicas del hogar.

También, los ciudadanos pueden solicitar apoyo al OOAPAS para detectar posibles fugas, llamando al número telefónico 113 22 00, para que personal del Organismo programe una visita al domicilio.

Además de estas recomendaciones, es factible cambiar los hábitos de consumo con acciones sencillas como:

• Disminuir el tiempo al bañarse, pues cinco minutos es el lapso ideal, además de colocar una cubeta bajo la regadera en lo que sale agua caliente.

• Cerrar las llaves mientras se asean las manos, los dientes o se afeitan.

• Al lavar los platos, mantener la llave cerrada para enjabonar todo primero, y hacer un solo enjuague al final.

• Utilizar el agua donde se cuecen las verduras para preparar sopas o guisos, pues contiene los nutrientes que se desprenden de las verduras con el calor.

• Lavar la ropa aprovechando cargas completas para optimizar el uso del agua; el líquido que se utilizó en el enjuague se puede recolectar en cubetas para limpiar pisos o para las descargas del inodoro.

• Usar una cubeta y una esponja, en lugar de una manguera, para limpiar el automóvil.