CANCÚN, Q.Roo.- Cultivos como el chícharo y ejote son de alto impacto y se riegan con aguas residuales de plantas de tratamientos en estados como Hidalgo, Oaxaca y Guerrero, por ello se buscará impulsar el aprovechamiento de esas aguas que actualmente se regresan al medio ambiente, informó Milton Henestrosa Zárate, gerente del programa de agua potable y alcantarillado de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Cancún fue sede de la Reunión Nacional de Programas Federales de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento en la que participaron 300 personas de todo el país en donde una de las principales conclusiones de estas reuniones fue el impulso al tratamiento de aguas residuales para darles uso en cultivos de alto impacto que aceptan este riego en lugar de regresarlas a los cuerpos receptores de agua. 

El programa piloto se lleva al cabo en los estados antes mencionados mediante 12 plantas que ahí funcionan en zonas pobres donde manejan el agua de rodada (agua de inundaciones) que es de primer uso y en base a esto se propuso el de aguas residuales para que se reutilicen en cultivos que así lo permitan y generar riquezas en la zona.

En el caso de Hidalgo, por cada hectárea se tenía una ganancia anual de 30 mil pesos y con la planta es ahora de 300 mil pesos, pero se cambió el cultivo y se tecnificó. 

La Conagua se comprometió a dar mayor impulso con este sistema para tener agua suficiente en zonas donde carecen del vital líquido para generar más alimentos que acepten esa agua. 

El costo del tratamiento en zonas urbanas está entre 1.60 a dos pesos por cada metro cúbico de agua tratada y para las zonas rurales se habla de 2.50 a tres pesos por cada metro cúbico de esa agua residual, que es más costoso por la lejanía. El reto es hacer sostenibles las plantas para obtener recursos que permitan su funcionamiento e incentivar a las zonas rurales para que vigilen que éstas funcionen adecuadamente.

Actualmente los hoteles que tienen plantas de tratamiento con esa agua riegan sus jardines.

Entre las conclusiones se llegó a la modificación del Artículo 4to. Constitucional en el que se establece como derecho humano el acceso al agua, por lo que la Cámara de Diputados tiene un año para publicar el reglamento a esa modificación, lo que cambiará el actual panorama.

Henestrosa Zárate enfatizó: "Hay organismos ineficientes, una rotación de personas impresionante, falta de recursos, demasiadas personas operan sistemas, ineficiencia física de redes, entre un 40 y 50% se tira el agua. Un ejemplo, en países desarrollados tres personas operan mil tomas, en México son de 15 a 20 quienes hacen el mismo trabajo pero no por falta de capacitación, sino porque políticos envían a esos lugares a sus recomendados".

Por lo que confía que con la modificación al reglamento este tipo de situaciones irregulares desparecerán.