Sara Galeote
Estudios realizados por la UNAM, campus Morelia, revelaron que en los últimos 100 años la entidad perdió 70 por ciento de sus lagos, lagunas, ríos, arroyos y pantanos. Aunado a ellos, se agrega el problema de la contaminación del agua toda vez que en el Estado el 15 por ciento de los cuerpos de agua superficial se encuentran fuertemente contaminados, así lo anunció Felipe García Oliva del Centro de Investigaciones de la UNAM.
Y es que para poder mitigar y adaptarse a las condiciones derivadas del Cambio Climático Global (CCG) generadores de este tipo de escenarios, es necesario hacer estudios de diagnóstico en los cuáles se estimen las emisiones de los Gases de Efecto Invernadero (GEI), se desarrollen escenarios climáticos y se evalúe la vulnerabilidad de diferentes sectores de la sociedad antes estos cambios, investigación en la que participan investigadores de la UNAM, campus Morelia.
En México, se ha realizado un esfuerzo importante en estos diagnósticos a nivel nacional y actualmente se realizó a nivel estatal el estudio denominado “Inventario de Gases de Efecto de Invernadero y Escenarios del Cambio Climático Global en el Estado de Michoacán”, así lo informó, Felipe García Oliva del Centro de Investigaciones de la UNAM coordinador del proyecto cuyo objetivo es realizar los diagnósticos antes mencionados para el estado de Michoacán.
Dio a conocer que el reporte final ya ha sido entregado a la Secretaria de Urbanismo y Medio Ambiente del gobierno del estado de Michoacán, en el cual se encontraron resultados relevantes en materia de agua por lo que explicó que a pesar de que el balance hídrico para el estado es positivo, “el estudio reveló que en los últimos 100 años que en la entidad se perdió 70 por ciento de sus lagos, lagunas, ríos, arroyos y pantanos. Al problema de la pérdida de cuerpos de agua superficiales en Michoacán, se agrega el problema de la contaminación del agua. Para la entidad se reporta que el 15 por ciento de los cuerpos de agua superficial se encuentran fuertemente contaminados”.
Respecto a la vulnerabilidad de las principales regiones climáticas el estudio encontró que la región de Tierra Caliente, por ejemplo, es vulnerable a los eventos de sequía, a una baja disponibilidad del recurso hídrico y alta variabilidad en la disponibilidad de agua, debido a la magnitud del incremento de temperatura y la reducción de la precipitación. Al mismo, tiempo, estas características la hacen dependiente del agua.
En contraparte, informó, que en las regiones templadas del estado, que son las que albergan el mayor número de la población y un acelerado proceso de urbanización de las ciudades, los incrementos de temperatura y lluvias extremas pueden tener influencia sobre la disponibilidad de agua.
García Oliva recalcó que en general el estudio mostró que “todos los sectores analizados tienen un algún nivel de vulnerabilidad ante los escenarios del cambio climático global en Michoacán, por lo que es necesario diseñar estrategia que permitan adaptarse a dicho cambios”.
Cabe señalar que el cambio climático global (CCG) es uno de los problemas ambientales más relevantes del mundo, está más que comprobado que las actividades del ser humano han modificado a la química atmosférica a una velocidad sin precedente en toda la historia del planeta.
El incremento en la concentración de gases de efecto invernadero (GEI) aumenta la capacidad de la atmósfera para calentarse. Los efectos del calentamiento de la atmósfera no solamente se expresan en incrementos de la temperatura, sino que la dirección de los vientos también se modifican y por tanto, la distribución de las lluvias en el planeta.