Expertos recomiendan concientizar sobre el uso racional del líquido, puesto que sin ello resultan inútiles obras de gran magnitud como las presas

GUADALAJARA, JALISCO (16/FEB/2012).- La Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) tiene agua potable garantizada por 15 años, considerando el crecimiento poblacional que se registra año con año. Por ello, resulta imperativo que las obras para captar el líquido de fuentes superficiales, como el Río Verde, sean concluidas y puestas en marcha, de tal manera que la garantía se incremente al menos hasta el año 2030.

Así se informó durante la presentación oficial del primer foro del agua, orquestado por el Consejo Consultivo del Agua (CCA), que tendrá lugar los próximos días 20 y 21 de marzo, en el auditorio de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), ubicado en la intersección de la Avenida Chapultepec con López Cotilla, y que estará abierto al público en general.

Tanto el presidente del CCA, Ramiro González de la Cruz, como el representante de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Federico Santos Solís, coincidieron en que el abatimiento de las zonas naturales de recarga es grande, por lo que resulta "muy conveniente comenzar a buscar la manera de proteger esas áreas, y que permitan que nuestros acuíferos se recuperen".

En la medida que los mantos acuíferos reciban más agua de la que se les extrae, explicó Santos Solís, su recuperación será evidente en el mediano y largo plazo, lo que irá en beneficio de las generaciones futuras.  

A la par, la recuperación de mantos freáticos y el aprovechamiento de vías alternas para abastecer de agua a la población metropolitana incidirán en el volumen que se extrae actualmente al Lago de Chapala, que ronda los 275 millones de metros cúbicos, es decir, el 3.4% de la capacidad total del vaso lacustre.

"Si año con año le sacamos esa cantidad, y la sumamos a la evaporación, que es muy grande en Chapala, pues nuestro lago va yendo para abajo; por eso hay que buscar otras alternativas de solución. Realmente, con el volumen de agua en el Lago de Chapala, el Río Calderon (y) los pozos, tenemos reservas para seguir aprovechando por 15 años, pero la idea es tener hasta el 2030 el abastecimiento garantizado de agua a toda la ZMG, con el crecimiento que se viene dando".  

Entre las obras "alternativas" para abastecer a Guadalajara destacó la Presa El Zapotillo (actualmente en construcción, en el municipio alteño de Cañadas de Obregón) y la presa derivadora de El Purgatorio, necesaria para que el agua del Río Verde llegue a la ciudad.

Pero aunado a los proyectos, se sugirió una verdadera intención de preservación por parte de todos los usuarios, no solo de Guadalajara, sino del país entero. De otra forma, las obras millonarias que se realicen siempre serán insuficientes y adelantarán lo que los especialistas vaticinan como "las guerras del agua".

"Este foro va encaminado a que la gente conozca lo que realmente tenemos de agua y que tenemos que cuidarla, porque, si no lo hacemos así, cada día será peor para nosotros. Las guerras que vienen son por el agua; entonces hay que cuidarla".

El "Foro del Agua 2012" reunirá a especialistas en el tema, expertos universitarios y funcionarios de organismos operadores de otros estados, para que compartan su experiencia. La invitación se hizo abierta a toda la comunidad para que conozcan las problemáticas que atraviesan Jalisco y la Zona Metropolitana de Guadalajara, en este tenor, así como plantear soluciones posibles.

Para saber

El dato de que Guadalajara sólo tiene 15 años asegurados de agua potable es alarmante, pero tiene razón de ser. El crecimiento poblacional que experimenta la metrópoli a cada año y la escasa o nula conciencia de los usuarios sobre el valor del líquido han derivado en un mayor consumo, lo que obligó el año pasado al Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) a aplicar un sistema de tandeos para ahorrar agua, pues la temporada de estiaje le complicó la dotación.

Aunado a ello, diversas obras para optimizar la entrega de agua en la ciudad han sido consideradas como inviables, y otras tantas simplemente no se usan. Tal es el caso de la Presa de Arcediano, que se buscaba edificar en la Barranca de Huentitán, y que finalmente se suspendió porque las condiciones del terreno impedían su construcción.

También el cambio en las condiciones climatológicas ha incidido en este déficit, toda vez que en adición a la extracción desmedida que se hace de los pozos, el Lago de Chapala y cuerpos de agua, la evaporación elimina una gran parte del líquido que podría ser usado en labores de riego, agrícolas o urbanas.