HABRÍA CAPACIDAD PARA ATENDER SÓLO 11 MIL HECTÁREAS DE SIEMBRA
En virtud de los bajos niveles de agua que registran las presas del municipio de Durango, durante el ciclo primavera-verano, sólo habría capacidad para abastecer con el vital líquido a un 34 por ciento de la superficie de los cultivos que se siembran en las comunidades rurales de la zona Valle, lo que representa 11 mil hectáreas de un total de 24 mil 320, según reveló el titular de la Dirección Municipal de Desarrollo Rural Sustentable de Durango, Francisco Ríos Parra.
VOLÚMENES
De acuerdo con el funcionario municipal, esta situación obedece a que no se pueden extraer, al menos por el momento, grandes volúmenes de agua de las presas de la localidad como son la Guadalupe Victoria, Santiago Bayacora y Peña del Águila ya que estos vasos hidráulicos registran a la fecha un llenado que no permite realizar maniobras de ese tipo considerando que no se han presentado precipitaciones pluviales.En el caso de la presa Peña del Águila, detalló, se encuentra a un nivel de llenado del 23 por ciento, mientras que la Guadalupe Victoria registra un 35 por ciento, en tanto que la Santiago Bayacora presenta el nivel más alto con un nivel cercano al 75 por ciento.
"En la suma de toda la superficie que tenemos para riego, que es dotada por las presas que se encuentran en el municipio, estamos coincidiendo con lo que se está manejando a través de los diferentes órdenes de Gobierno en que el porcentaje para darles agua a esos cultivos de riego es bajo".
De igual forma, señaló que, según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la garantía para el ciclo primavera-verano está mermada, pues no hay suficiente líquido para apoyar a la superficie de cultivos de riego, "y eso nos viene a poner un poco en problemas, porque estamos esperando, con la voluntad de Dios, y que seguros de que así va a ser, las lluvias se regularicen a partir de junio, julio", añadió.
ESPERANZA
Si las precipitaciones pluviales se llegan a presentar en este periodo, abundó Ríos Parra, la situación cambiaría para el campo duranguense en general, pues eso ayudaría a incrementar la superficie de riego que puede ser apoyada con agua de las presas una vez que estas registren un mayor nivel de llenado producto de la captación de líquido de las lluvias