El funcionario estatal dijo que la situación es crítica por la sequía que se ha prolongado más de un año y que ha obligado a mediar entre los afectados para surtirles agua potable.
En sitios como la comunidad de Pueblo, añadió, hay 30 mil personas que no tienen agua de manera regular, por lo que se intensificaron las acciones para atender esa zona.
El diputado local Gustavo Pedro Cortés coincidió en que se han presentado hechos violentos y explicó que tuvo conocimiento de dos conflictos de este tipo: uno en el municipio Canatlán, en donde se registró una pelea por el agua para el ganado, y otro en la comunidad Santa Catalina de Siena, en Guadalupe Victoria, donde se le puso candado al tanque de agua por orden de la Presidenta de la Junta Municipal, lo que ocasionó inconformidad. Con esta acción, dijo, condicionó el uso y dotación.
Dijo que las medidas que se han implementado por la sequía no son suficientes y los problemas que siguen van a ser mayores, porque ahora se entra en una etapa de sobrevivencia y a partir de ahí la gente se defiende con lo que puede, “no hay políticas institucionales para la atención del tema”.
El dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Luis Edmundo Ravelo, dijo que tiene el dato de un conflicto grave que se presentó en una comunidad de San Juan del Río por el control de los pozos.
“Hay mucha gente que piensa que la siguiente lucha no va a ser por el petróleo, sino por el agua, por eso desde este momento se tiene que trabajar en el tema, sobre todo en lugares como Durango, donde para los próximos meses se prevé que más de 60 mil personas van a tener escasez”, resaltó.