GUADALAJARA, JALISCO.- Es imperativo construir un segundo acueducto para llevar agua del Lago de Chapala a la Zona Metropolitana de Guadalajara, de acuerdo con autoridades federales y estatales en la materia, que argumentan que eso no significaría extraer más líquido, porque sería “técnicamente imposible”.

El proyecto está en “veremos”, aunque el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) y el Gobierno del Estado ya obtuvieron un crédito de 16 a 18 millones de pesos para analizar la viabilidad de la obra.

El SIAPA insiste en la necesidad de tener un segundo acueducto pero durante el proceso electoral, los candidatos a la gubernatura anunciaron su oposición argumentando que evitarían mayor explotación al lago. El proyecto, pues, es inseguro.

La razón principal para insistir es el estado de la infraestructura actual: el Acueducto Chapala-Guadalajara opera desde 1991 y presenta tal deterioro como para advertir que si no se construye un segundo acueducto, el día en que el primero sufra algún daño, en el peor de los escenarios hasta 60% de la población de la ciudad, o 2.6 millones de tapatíos, podría quedarse sin agua durante meses.

Así lo afirma el director de la Comisión Estatal del Agua (CEA), César Coll Carabias, quien explica que es necesario considerar las dimensiones del tramo afectado y la disponibilidad del repuesto, y recuerda que el sistema ha operado sin interrupción y sin el mantenimiento recomendable.

El funcionario critica que los candidatos prometieran oponerse al proyecto, pues cuando asuman el puesto enfrentarán el problema: “Para nosotros es una obra urgente. El primer acueducto lleva operando más de 20 años; se ha verificado que tiene grandes incrustaciones que empiezan a bajar su eficiencia. Y no es una incrustación que se pegue nada más al fondo del tubo, sino que son una especie de grandes hongos que se van formando”.

Por su parte, los opositores al proyecto, incluyendo ciudadanos organizados de la Ribera de Chapala, insisten en que es injusto extraer más agua del lago y que las autoridades ocultan el hecho de que sacan líquido a Chapala por otras vías.

La decisión quedará en manos de los futuros gobiernos del Estado y metropolitanos, y el Consejo de Administración del SIAPA estará integrado, de hecho, por cuatro alcaldes del PRI, el mismo partido del futuro gobernador (Aristóteles Sandoval). Por eso, según los funcionarios de la CEA, es necesario que los próximos gobernantes se informen sobre la situación y el análisis de obras alternas.