​Durango, Dgo.- A pesar de que las lluvias ya se generalizaron a nivel estatal, aún quedan 220 comunidades que necesitan agua para consumo humano; los municipios que viven de aguas rodantes nuevamente comienzan a captar escurrimientos. 

El director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Jorge Armando Nevárez Montelongo declaró que el uso de seis pipas para repartir agua se concentra en los municipios del norte, así como en La Laguna. 

De acuerdo al funcionario, la necesidad de seguir llevando agua a 220 comunidades se debe a que las precipitaciones pluviales no han genera generado el escurrimiento suficiente para abastecer los mantos acuíferos. 

Comentó que además de llevar agua a las localidades se ha otorgado el apoyo para comenzar obra hidráulica, principalmente en municipios que se abastecían de ríos y arroyos. 

Hace cuatro meses que la presa La Rosilla II, ubicada en el municipio de Pueblo Nuevo, estuvo a punto de secarse ahora se encuentra a un 16 por ciento de su capacidad, reactivando el uso de aguas rodantes para abastecer a 34 mil personas.