Viridiana Aguirre
Tepic, Nayarit.- Debido a la detección de una plaga en los manglares ubicados en Tuxpan, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), a través del programa federal Pro Árbol, saneó 500 hectáreas de mangle rojo y mangle blanco en el ejido Unión de Corrientes para erradicar la flora nociva que afecta este ecosistema, anunció el subgerente de la Comisión Nacional Forestal en Nayarit, Darío Flores.
"La planta invasora que se encuentra perturbando la zona manglera se desarrolla a nivel del suelo y de forma paulatina conforme se desarrolla se va enredando en los árboles de mangle hasta terminar por cubrirlos en un periodo aproximado de cuatro a seis meses, hasta que finalmente los árboles de mangle quedan completamente cubiertos por esta planta y terminan por secarse," explicó.
La actuación de la dependencia fue rápida, ya que la planta parásita puede provocar en el mangle la disminución del crecimiento de los árboles invadidos, reducción en la cosecha de semilla, efectos nocivos en la madera, predisposición a insectos y hongos y cuando la infección es grave puede causar la muerte del arbolado, dijo el funcionario federal.
En cuanto al operativo de saneamiento, explicó que éste se desarrollo en el concepto de apoyo de Saneamiento Forestal y se pagaron dos mil 133 jornales a 20 mujeres y 40 hombres del ejido que llevaron a cabo las acciones de limpieza de la planta invasora.
El método de control utilizado fue el tratamiento manual, ya que el aplicar químicos se contamina el agua y se afectan las especies marinas y algunos roedores que habitan en el mangle. La aplicación del método fue quitar la planta parásita de manera manual, recolectar los desechos de la planta invasora y con lanchas con motor las sacaron y acumularon en un lugar específico para que se seque.
Cabe mencionar que estos trabajo fueron culminados oportunamente, de forma que se ha observado rápidamente la recuperación del mangle, por la que se espera que en el área donde se hicieron los trabajos de limpieza no vuelva a invadir a este ecosistema, permitiéndoles a las especies que se encontraban infestadas que en el corto o mediano plazo se recuperen de forma paulatina hasta alcanzar su vigor y desarrollo forestal.