Ciudad de México.- El Gobierno federal pretende crear en la zona del lago de Texcoco un paraíso ecológico.

Y es que, luego del intento fallido de construir un aeropuerto en el lugar, ahora la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tiene bajo licitación dos concursos para el diseño, construcción y supervisión de un moderno parque que será 23 veces el tamaño del Bosque de Chapultepec.

De acuerdo con el titular de Conagua, José Luis Luege, la dependencia ha invertido, hasta el momento, mil 700 millones de pesos en la compra de mil 600 hectáreas a un precio de entre 150 y 169 pesos por metro cuadrado.

Además, agregó, se han destinado 60 millones de pesos en el Lago Nabor Carrillo, en plantación de árboles y labores de cercado en la zona federal.

"La adquisición de la tierra tiene ese fin, una área de amortiguamiento ecológico que impida el crecimiento de la ciudad por el lado oriente en Texcoco, Atenco, Ecatepec", afirmó el funcionario en entrevista.

Pero ejidatarios del Estado de México se han negado a la venta de terrenos, por considerar que el proyecto significa la antesala de la reactivación del aeropuerto alterno de la Ciudad de México, por lo que se opondrán a la construcción de un parque ecológico.

Al menos tres poblaciones han vendido hectáreas a la Conagua. Santa Isabel Ixtapan vendió 400 hectáreas de su zona de agostaderos y San Cristóbal Nexquipayac, alrededor de 120, pero actualmente están en litigio para recuperarlas.

"No vamos a caer en la idea del parque ecológico. Quisiéramos que fuera realidad, pero lo están usando como pretexto para adueñarse de la tierra de forma perversa", denunció Ignacio del Valle Medina, líder del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT).

"El proyecto que pretende reactivar la Comisión Nacional del Agua en el lecho del lago de Texcoco, es un pretexto para el aeropuerto", agregó.

El proyecto, llamado Parque Ecológico Lago de Texcoco (PELT), considera 14 mil 300 hectáreas al oriente de la zona metropolitana de la Ciudad de México, en lo que ahora es un llano repleto de maleza donde predomina un olor fétido proveniente del Bordo Poniente.

De acuerdo con la Conagua, el plan, que pretende ser un pulmón verde para el Valle de México, tendrá una inversión total de 10 mil millones de dólares tan sólo en su primera etapa.

"Este proyecto de mitigación y rescate ecológico en la franja de amortiguación del Lago de Texcoco tiene como propósito fundamental mejorar la calidad de vida de la población.

"Se trata de un proyecto que contribuye a la consolidación de reservas naturales y brinda resguardo al sistema hidráulico y ambiental del lago", se lee en los objetivos del proyecto.

Bajo la dirección del arquitecto mexicano Iñaki Echeverría, el PELT contempla dos módulos deportivos, cada uno con cinco canchas de futbol, dos canchas de basquetbol, una pista de patinaje, un gimnasio al aire libre y zona de juegos infantiles.

También se prevé reforestar los polígonos Hidalgo, Carrizo y San Luis Huexotla con 1.5 millones de árboles y rehabilitar charcas para piscicultura, así como construir ciclovías y senderos para peatones, módulos de servicios, tiendas, accesos, estacionamientos y lienzo charro.

Lo anterior, sumado a la adquisición de 2 mil 500 hectáreas de los núcleos ejidales de Santa Isabel Ixtapan, San Luis Huexotla, Santa María Chimalhuacán, San Bernardino, San Felipe y Santa Cruz de Abajo, San Cristóbal Nexquipayac, Santa Isabel Ixtapan, Atenco, San Miguel Tocuila e Hidalgo y Carrizo.

Esto, con el fin de tener un área de amortiguamiento que limite el desarrollo urbano.

No obstante, el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, el grupo opositor que provocó la cancelación del proyecto aeroportuario, externó su rechazo a la construcción del parque por considerar que es un pretexto para reactivar el plan impulsado en el Gobierno de Vicente Fox.

"No nos tragamos la idea del parque ecológico, porque nuestros ríos están contaminados y hemos pedido por mucho tiempo plantas tratadoras de agua sucia y nunca nos han hecho caso", reprochó

el campesino ejidatario Adán Espinosa, en San Salvador Atenco.

"No permitiremos el arrebato bajo ninguna estrategia. Nunca nos consultan, sólo se imponen. Cuando violentan la paz cotidiana de un pueblo hospitalario, se encontrarán con el rechazo", auguró por su parte el ejidatario Macario Ramírez.

Luege Tamargo reconoció que, además del rechazo de los ejidatarios también se enfrenta la invasión en la zona federal para el desarrollo de vivienda.

"Tenemos muchos problemas en todos los municipios de Edomex de invasores profesionales. Algunos desarrolladores de vivienda inducen invasión, es una situación difícil", dijo.

"Socialmente, los que rechazan el proyecto son los corruptos, los que promueven invasiones, los desarrolladores de vivienda corruptos. Es increíble cómo han querido meterse a la zona federal de Texcoco", reprochó.

Para funcionario, la meta de este proyecto es recuperar lo que fue el gran lago de Texcoco y garantizar su continuidad en el próximo Gobierno.

"Todo esto es un ganar-ganar. La gente de Atenco se oponía a vender la tierra para el proyecto viejo del Aeropuerto. Pero ahora lo que van a tener al lado de sus tierras es un parque. ¿Quién puede oponerse a eso?, cuestionó Luege.

De acuerdo con la convocatoria de Conagua, las obras a diseñar y ejecutar para el PELT incluyen dos módulos deportivos, cada uno con cinco canchas de futbol, futbol rápido y futbol siete; dos canchas de basquetbol, una pista de patinaje, un gimnasio al aire libre y zona de juegos infantiles.

También están previsto reforestar los polígonos Hidalgo, Carrizo y San Luis Huexotla con 1.5 millones de árboles, rehabilitación de charcas para piscicultura, nuevos módulos de servicios, sanitarios, tiendas, accesos, estacionamientos bici-estacionamientos y lienzo charro.

"La contratista estará obligada a la prestación de servicios para la elaboración de los proyectos ejecutivos para el diseño urbanístico, paisajístico, ambiental, ingenierías y arquitectónicos de las zonas Lago Nabor Carrillo, zona de mitigación ambiental y terrenos del Estado de México, así como la construcción de las obras que deriven de los proyectos ejecutivos", dice la convocatoria para la licitación del contrato principal.

Abunda mal olor en zona

El Lago Nabor Carrillo, ubicado en el corazón de lo que fue el Lago de Texcoco, está convertido en un nido de bacterias y mosquitos. En el ambiente se percibe un fuerte olor que proviene del basurero Bordo Poniente.

Incluso, en época de estiaje, el aire fétido provoca ardor en los ojos de los habitantes de las delegaciones del DF aledañas al Lago de Texcoco como Iztacalco, Gustavo A. Madero e Iztapalapa, y los municipios mexiquenses como La Paz, Chimalhuacán, Ixtapaluca, Nezahualcóyotl y Ecatepec, aseguran los lugareños.

Lo que fue el cuerpo de agua más importante de la época prehispánica hoy es un llano repleto de maleza con algunas extensiones de territorio erosionado. Y aquí es donde el Gobierno federal planea, desde al menos cuatro años, construir el "pulmón verde" más grande del mundo: el Parque Ecológico Lago de Texcoco (PELT).

En julio de 2008, durante la campaña de reforestación "Planta un Árbol y Sé Parte de la Historia", el Presidente Felipe Calderón anunció en Texcoco el rescate ecológico del vaso e incluso presumió que algún día se lanzaría con fuerza. Pero hasta ahora, sólo se ha avanzado en los proyectos ejecutivos de la construcción del parque y en la restauración de suelos.

"Algún día lo lanzaremos con toda fuerza, pero queremos hacer en esta zona sur del Lago de Texcoco, sur-oriente, un gran parque, una gran reserva ambiental, que será la esperanza de vida futura para todos los que habitamos en la Ciudad de México", dijo Calderón en ese entonces.

A casi tres meses de concluir la administración, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) licita el diseño, construcción y supervisión del PELT que busca desarrollar equipamiento deportivo y recreativo en parques, lagos, canchas y 115 kilómetros de ciclovías.

En el proyecto del arquitecto mexicano Iñaki Echeverría, el lago Nabor Carrillo es ancla para actividades acuáticas.

Al lago, que tiene una superficie de mil hectáreas y una capacidad de almacenamiento de 36 millones de metros cúbicos, arriban cada año más de 300 mil aves migratorias de 153 especies procedentes de Canadá y Estados Unidos.

Durante un recorrido, se pudo constatar que son pocas las aves en el lugar y muchas menos las que se posan en el agua buscando alimento.

Y es que las aguas residuales que fluyen fuera de la planta de tratamiento no reciben ningún tipo de desinfección, sino que se espera que la mejora de la calidad microbiológica ocurra en el lago de forma natural, aspecto importante a considerar si se toma en cuenta que el líquido del Nabor Carrillo será reutilizada para fines de riego, actividades recreativas de remo, canotaje, pesca deportiva y piscicultura en el nuevo proyecto ecológico.

Alrededor de San Salvador Atenco se encuentran varios ríos, todos ellos casi sin agua y muy contaminados. En uno de los que proviene de Texcoco puede distinguirse entre el fango una alfombra enterrada entre basura.

"Hablan de ecología cuando permiten que nos enfermemos con los productos que nos comemos, porque los cultivos ahora los regamos con el agua sucia", lamentó el ejidatario Adán Espinosa.