Nuevas lluvias en la región centro occidental de Estados Unidos están por causar más inundaciones y agregar más caudal a los ríos ya crecidos, por lo que se cree que seguirán en niveles altos hasta fines de mes.

El caudal de las aguas crecía en el río Illinois, en el centro del estado. En Misuri, seis pequeños diques fueron desbordados en el norte de San Luis por el desborde del río Misisipi, aunque los daños no afectaron a muchos cultivos.

Los ríos Misisipí e Illinois han crecido en algunos lugares, pero eso no significa que haya pasado el peligro. El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó que habrá un descenso lento debido en parte a lluvia adicional, que podría hacerlo crecer casi tres centímetros (1 pulgada) a lo largo de varios estados centro occidentales.

“Mientras la crecida continúe definitivamente hay más presión en los diques”, destacó Mike Petersen, un vocero del Cuerpo de Ingenieros del Ejército.

Los nuevos problemas se presentaron en Illinois, sobre el río del mismo nombre. En Peoria Heights, con una población de 6.700 personas, los caminos y las construcciones estaban inundados y las estructuras a orillas del río fueron invadidas por las aguas.

Los bomberos temían que el combustible de los negocios y de los vehículos comenzara a filtrarse, lo cual podría provocar incendios en las áreas anegadas, a las que sólo se puede llegar por lancha.

“Esa es nuestra pesadilla. Que alguna construcción se incendie y no podamos acceder al lugar”, destacó el jefe de bomberos de Peoria Heights, Greg Walters. Unas 30 viviendas y negocios han sido evacuadas.

Las actividades de embarque se reanudaron el martes en un tramo de unos 25 kilómetros cerca del río Misisipí cerca de San Luis después que el Servicio de Guardacostas determinó que 11 remolques que se hundieron durante el fin de semanas no son un peligro para la navegación.