Texas.- Para la Comisión de Calidad Ambiental de Texas la sequía que amenaza con registrarse este año, algunos distritos de riego podrían quedarse sin agua y complicar el suministro a las ciudades del Valle del Río Grande.
Es por eso que será necesario reforzar la vigilancia para certificar que el uso del vital líquido no se desperdicie y que los agricultores por la falta de lluvia no les reduzca el nivel en los distritos de riego.
En entrevista con Erasmo Yarrito Jr., Gerente general del Río Bravo y el Programa de Derechos de Agua y Derivación del Distrito 15 en Harligen, este 2013 será un año difícil porque las presas cuentan solamente con un 60 por ciento de reserva de agua que, de no cuidarse, los obligaría a racionarla.
“Lo que a las ciudades se les dificulta más es proveerles agua de riego a los agricultores, en el 2012 llovió mucho y llenó las presas, pero con lo que se podría avecinar podríamos vernos impactados”, advirtió Yarrito a Expreso.
La ciudad de Brownsville cada año cuenta con 50 mil acres pies de agua para su uso.
“Necesitamos de la lluvia para sobrevivir, pero sino tenemos lo suficiente dentro de la cuenca, nuestros niveles seguirán bajando y eso nos preocupa, el programa de derechos de agua calcula la cantidad que se usará a través del CILA, restando las reservas municipales, siempre asegurándonos que tengamos la necesaria cada mes”, agregó.
Dijo que aquí en el Valle del Río Grande la mayoría de los municipios obtienen el agua cruda para el tratamiento de los distritos de riego y cuando la suministra se mezcla y trasporta.
Aunque en Matamoros ya consideran racionar el agua para la ciudad, hasta el momento Brownsville dice no estar en la situación, pero advierte que de no cuidarla la reserva puede bajar.
El tratado de 1944 no menciona la construcción de tres presas binacionales y tenemos dos en este momento. Si un tercer depósito se construye en el futuro, no se construirán aguas debajo de la Presa Falcón.