La Paz, (PL) Casi nueve mil familias fueron afectadas hasta hoy en cuatro departamentos de Bolivia por las lluvias veraniegas, según cálculos conservadores del Ministerio de Defensa.
Los aguaceros hicieron mella en los departamentos de La Paz, Chuquisaca, Tarija y Potosí, sobre todo por las riadas, granizadas y crecidas de los ríos, que dañaron carreteras y caminos y provocaron daños a las viviendas y a los cultivos.
El ministro de Defensa, Rubén Saavedra, aseguró que el último parte recogió casi nueve mil familias damnificadas, en tanto el viceministro encargado de la Defensa Civil, Oscar Cabrera, destacó que "unas seis mil fueron atendidas con ayuda humanitaria".
"Estamos trabajando para que las familias puedan recibir todo el apoyo y ayuda humanitaria y además hacer preparativos para hacer una reconstrucción de todo lo afectado por estos eventos", enfatizó el ministro.
Saavedra comunicó también que el Estado dispone de los recursos necesarios para afrontar las emergencias.
Las lluvias fueron particularmente intensas en el departamento de La Paz, cuya gobernación alertó a los transportistas sobre el peligro de deslizamientos de tierras en los caminos y carreteras.
Mientras, los numerosos ríos de esta capital permanecen crecidos y los equipos encargados de evitar obstrucciones por el arrastre de piedras y arena trabajaron durante todo el fin de semana, pese a lo cual varios puentes sufrieron daños de consideración, sobre todo hacia la zona sur de la urbe.