La labor de este laboratorio se cumplirá durante el recorrido del río hasta llegar a la planta de tratamiento de Boró. La medida se adoptó luego que la Autoridad Nacional del Agua (ANA) autorizara a la minera La Zanja, el vertimiento de las aguas residuales industriales, previo tratamiento, al citado río.
Juan Valdivia Goycochea, gerente general de Epsel, manifestó que abril próximo se deberá contar con el acondicionamiento del laboratorio para iniciar los trabajos.
Detalló que para ello se adquirirán espectrofotómetros y otros equipos de tecnología de punta que permitan a los especialistas realizar la evaluación y detección de metales pesados en la cuenca y su recorrido hacia Boró. “Esta es la preocupación cuando hay enclaves mineros”, afirmó en diálogo con la Agencia Andina.
El funcionario indicó, además, que actualmente están en plena labor de acreditación del Laboratorio de Control de Calidad de agua cruda y tratada de Epsel que será implementado con equipos más sofisticados para la evaluación y detección de metales pesados.
Refirió que tras la autorización dada por la ANA a la empresa minera La Zanja, que deberá realizar un tratamiento previo a las quebradas La Pampa y El Cedro; Epsel ha asumido una posición vigilante y previsora ante el riesgo a las aguas crudas que llegan al valle lambayecano para su posterior potabilización.
Precisó que a Epsel le preocupa que en la laguna Boró no existan agentes contaminantes. “Allí nosotros efectuamos nuestro análisis”, enfatizó.
El especialista manifestó que la minería en la cuenca del río Chancay-Lambayeque, está localizada principalmente en la parte alta, dentro de las provincias cajamarquinas de Chugur, Catilluc, Santa Cruz, entre otros, existiendo el riesgo de contaminación, si la minera no cumpliera con el tratamiento previo.
Mencionó que Epsel y otras instituciones, en su calidad de actores de la cuenca Chancay-Lambayeque, participarán este año en los monitoreos programados por la ANA.
El objetivo de estos monitoreos es evaluar en el lugar la calidad de los cuerpos naturales de agua superficial de la cuenca Chancay–Lambayeque, verificando las principales fuentes de contaminación de aguas residuales.