Científicos de la Universidad de Chicago en Illinois lograron en uno de sus laboratorios hacer “nudos” con el agua, experimento que servirá para estudiar a los gases ionizados que existen en la atmósfera exterior del Sol, materiales superconductores, cristales líquidos o campos cuánticos que describen las partículas elementales.
La hazaña científica era buscada desde hace más de 50 años y ahora los resultados de la investigación de los físicos aparecen en la revista Nature Physics.
En su texto publicado, los investigadores señalan que la creación de un “nudo” en un fluido se parece muy poco a hacer un nudo con los cordones de los zapatos.
NUDO. Durante años los físicos creyeron que un vórtice —flujo turbulento en rotación espiral con trayectorias de corriente cerradas— podría ser torcido en un nudo, a pesar de que nunca habían visto uno ni en la naturaleza ni en laboratorio.
Para hacer el nudo de agua, lo que hicieron los investigadores fue crear su propio vórtice. Así, diseñaron un ala que se asemeja a una cinta delicadamente trenzada y la trajeron a la vida utilizando una impresora 3D.
Después de sumergir su obra maestra en el agua, utilizaron electricidad para crear pequeñas burbujas alrededor de ella. Los físicos jalaron el ala hacia delante, dejando un vórtice de forma similar a su paso. La fuerza centrípeta dibujó las burbujas en el centro del vórtice, revelando su otro lado invisible, anudando la estructura y permitiendo a los científicos observar cómo se movía a través del fluido.
Los investigadores creen que estructuras similares existen de forma natural en muchos lugares, incluyendo la superficie del Sol.