Se trata de un ejido ubicado en el municipio de Ramos Arizpe, Coahuila, ubicado casi en la línea que divide a Coahuila de Nuevo León. Como su nombre lo dice, en La Azufrosa, toda el agua que se puede extraer de los pozos contiene azufre y no se puede beber.
Pero por desgracia, la sequía se ha apoderado de todo el lugar y muchas veces, los pobladores e incluso los niños, deben tomarla, aunque luego lleguen las enfermedades estomacales. Los animales están muriendo, pues tampoco tiene agua para tomar.
El poblado más cercando donde pueden conseguir agua potable, está aproximadamente a 10 kilómetros, mismos que deben caminar con tinas o tambos para comprar el agua en una purificadora.
Ahí, los niños se bañan muy de vez en cuando, y cuando lo hacen, también lo hacen con agua “azufrosa”; ellos, al igual que las casi 25 familias que habitan en el ejido, piden el apoyo de la autoridad para salir adelante.