Distrito Federal— En México existen 587 zonas contaminadas por residuos peligrosos provenientes de la industria química, metalúrgica y automotriz.

Según datos del Programa Sectorial 2013-2018 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el manejo inadecuado de estos residuos, así como las fugas ocasionadas por accidentes y delitos ambientales pueden afectar la salud de la población, la contaminación del suelo, agua, aire y daños a los ecosistemas.

El Sistema de Sitios Contaminados (SISCO) registra como los estados de la República más afectados a Guanajuato, Veracruz y Querétaro.

Del total de lugares, 55 por ciento se originó por disposición de residuos, 13 por ciento por actividades mineras, 11 por ciento industriales y 3.4 por ciento a extracción de petróleo y a sus derivados.

“Hasta la fecha, 1.5 por ciento de los sitios ha sido remediado, 3.4 por ciento está en proceso de remediación y 95 por ciento no se ha atendido”, detalla la dependencia.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el costo económico asociado a la degradación ambiental por el manejo de los residuos en 2011 fue de 48 mil 148 millones de pesos, es decir, 0.3 por ciento del PIB para ese año.

Incumplen norma ambiental

La dependencia advierte que el cumplimiento de la normatividad ambiental permanece como un área vulnerable de la gestión ambiental.

“Entre otros factores lo compromete la insuficiencia de recursos humanos, financieros y de infraestructura en instituciones clave como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa)”, señala el informe.

La Semarnat comenta que su fortalecimiento debe enfocarse tanto en los aspectos estructurales como formativos y de capacitación e institucionalización de sus recursos humanos, así como en la adopción de tecnologías que permitan expandir las acciones de inspección y de vigilancia, y de los mecanismos e instrumentos para una mayor respuesta expedita y oportuna.

Entre los objetivos que se tiene para el término del sexenio en materia de residuos peligrosos están: el revisar el Programa Nacional de Remediación de Sitios Remediados; atender los compromisos con un Programa de Mercurio; además de enfocar “acciones y estudios para aumentar el número de sitios de confinamiento”.

En cuanto a la gestión de residuos en el país la meta de Semarnat es pasar de un 70 a un 83 por ciento en el 2018.

La secretaría explica que debido a los residuos y a la pérdida de capital natural, el crecimiento del país ha estado lejos de ser ambientalmente sustentable.

“Paralelamente al aumento del Producto Interno Bruto crecieron las emisiones de bióxido de carbono (CO2) —el principal gas responsable del efecto invernadero—, la generación de residuos de distintos tipos y la descarga de aguas residuales, a la vez que la cubierta de bosques y selvas se redujo”.