Ramón Aguirre, director de SACM, se reunió con diputados para aclarar los mitos sobre el pozo hallado en Iztapalapa, entre ellos que es falso que sea un súper hallazgo que resuelva los problemas de agua de 100 años.

Ante diputados locales, el director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Ramón Aguirre aclaró los 10 mitos entorno al acuífero descubierto en Iztapalapa, entre ellos la realidad de su explotación, que no generará hundimientos y que sí se trata de agua potable.

Pero el principal de esos mitos que debe descartarse, dijo, es aquel en el cual se cree que resolverá la problemática de escasez de agua para los capitalinos, pues “en el mejor suelo guajiro no va resolver más del 20% del problema”.

Al reunirse ayer con legisladores de la Comisión de Gestión Integral de agua –a la que no acudieron diputados del PAN ni del PRI- el funcionario explicó que podría comenzar a distribuirse líquido de este pozo en Iztapalapa en un lapso de “mes y medio a dos meses máximo”.

En la reunión estuvieron presentes también la Directora del Instituto de Geología de la UNAM, Elena Centeno, el geólogo Federico Moozer –quien propuso la extracción de agua de esos estratos profundos desde hace 20 años- y Federico Correa, director de calidad del agua del SACM.

La preocupación principal de los legisladores, entre ellos la diputada Ernestina Godoy, Carmen Antuna y Dione Anguiano, las tres del PRD, es que se cree la falsa expectativa de que eso resolverá la crisis de agua.

Por eso propusieron campañas sobre educación sobre uso del líquido, reutilización, pago de derechos, para clarificar a la ciudadanía que debe eficientarse su uso.

En su exposición el funcionario insistió en que la explotación del acuífero “ayudará un poquito, 100 metros cúbicos de los mil metros cúbicos que se necesita” Iztapalapa y para ello se adquirirá, entre otros equipos, una bomba que soporte los 35 gramos centígrados a los que sale el agua del acuífero.

Entre los 10 que llamó “mitos” está el de que su potabilización es inviable”: Explicó que en un principio los estudios “arrojaron que estaba un poco fuera de la norma en hierro, pero ahorita sorprendentemente el pozo solamente está fuera en aspectos como conectividad, turbiedad, color (…) sorprendentemente el agua está saliendo potable”.

Respecto a que su extracción no sea viable explicó que lo es, y no causará hundimientos, pero sí es falso que sea un “súper hallazgo” que resuelva los problemas de agua de 100 años.

También consideró falso que deban cancelarse otras alternativas para abastecerse de agua, como lo es el aprovechamiento del agua de lluvia.

El costo promedio de traer agua de fuera del Valle de México es de tres mil 260 millones, el costo promedio para el caso de este pozo “anda en los mil 200 pesos, no es barato pero sí es más barato que cualquiera de las otras alternativas”, indicó.